Álvaro Palomo3 min lecturaNo es ningún secreto que la dirección deportiva del Betis prepara una restructuración profunda de la plantilla en el próximo mercado estival con refuerzos para una buena parte de las posiciones, aunque, lógicamente, ha establecido prioridades ante las carencias evidenciadas en la presente campaña.
Como ya ha informado ESTADIO en repetidas ocasiones, potenciar las dos bandas resulta preferencial, sobre todo la izquierda, en la que posiblemente se firmará a dos futbolistas, tanto en cuanto Abner Vinicius saldrá con casi toda seguridad y Miranda acaba en junio y aún no ha renovado. Ninguno ha rendido al nivel esperado y la demarcación sufrirá una remodelación integral. También está previsto rastrear el mercado de laterales derechos en busca de un refuerzo a pesar de que ahora mismo dispone de Bellerín, muy desacertado ante el Atlético, y de Sabaly, lastrado por las lesiones.
Más allá de esta prioridades, la dirección deportiva estudia la recomposición de otros puestos con un perfil muy definido a la hora de la búsqueda, entre los que asoman los flancos del ataque. Manu Fajardo tiene entre ceja y ceja dotar de mayor velocidad y desborde a los costados, o lo que es lo mismo sumar a la plantilla un tipo de futbolista que no ha destacado en el presente curso.
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A día de hoy, Abde responde a esta tipología, pero hasta el momento no ha respondido a las expectativas más allá de actuaciones puntuales y en enero se traspasó a Luiz Henrique, que sí ofrecía esa capacidad para desequilibrar. Assane Diao ha bajado su rendimiento y entra dentro de los planes una salida si llegara una buena oferta, al igual que en el caso de Abde.
También se ha desempeñado acostado a banda Rodri, pero, igualmente, en el Benito Villamarín consideran su marcha si les permite hacer caja. Tanto es así que en los dos últimos partidos Pellegrini ha apostado en la izquierda por Chimy Ávila.
En este contexto, se busca un perfil diferente a Ayoze o Fornals, más polivalentes y con tendencia al centro. Dicho de otra forma, se persigue la incorporación de un extremo puro, capaz de romper líneas pegado a la cal merced a su habilidad y a una velocidad que le permita meter otra marcha más al equipo, tanto en estático como a la espalda. En resumidas cuentas, implementar otro registro a la propuesta verdiblanca de cara a la próxima temporada, en la que el Betis presentará un proyecto muy renovado.