Volvió a ser titular en la Bundesliga dos meses después un Borja Iglesias que medita estos días su futuro. El 'Panda' no saltaba de inicio en el torneo regular alemán desde su debut el pasado 3 de febrero ante el Darmsdadt 98, aunque sí había sido la referencia en la Europa League en la eliminatoria a doble partido frente al Qarabag. Todavía no ha visto puerta ni brindado ninguna asistencia, aunque el gallego acumula mejores sensaciones en su octavo partido con el Bayer Leverkusen, con el que va a engordar su palmarés. De esta forma, si el '9' se marchó en el último mercado invernal con una Copa del Rey (21/22) en su haber, volverá, como poco, con el campeonato germano, que dejó virtualmente sentenciado la escuadra de Xabi Alonso con su 0-1 de este sábado ante el Unión Berlín de Nenad Bjelica. Además, los rojinegros se han clasificado para la final de la Copa (DFB Pokal) ante el Kaiserlautern y están en cuartos de la UEL, donde se verán las caras con el West Ham.
Aunque su gran valedor seguirá al frente del banquillo teutón, resulta improbable que ejecute la opción de compra (de ocho kilos en total, bonus incluidos) recogida en su contrato de cesión ni se espera que la renegocie a la baja, pese a que el propio Borja ya ha expresado su deseo de quedarse. Recientemente, el Rayo Vallecano se había posicionado para acogerle desde este verano, habida cuenta de que, con dos campañas más de contrato en La Palmera, ambas partes habrían pactado que es el momento ideal para separar sus caminos. Vinculado de nuevo Raúl de Tomás, desde la planta noble del Benito Villamarín descartan un trueque entre ex espanyolistas, entre otras cosas porque los planes arriba de los responsables verdiblancos pasan por desprenderse de los prestados Iglesias y Juanmi, así como de Willian José, amén de retener a Cédric Bakambu y 'Chimy' Ávila, contratando a un punta con cierto recorrido, pero menor de 25-26 años y con amplio margen de revalorización.
La prioridad del 'Panda' pasa por seguir en Leverkusen, por lo que esperará movimientos y, con la ayuda de una mayor aportación en lo que resta de temporada, tratará de ganarse la adquisición hasta 2027 allí. Si no, con el miedo perdido a emigrar, el de Santiago de Compostela ambiciona un proyecto ambicioso y firmar un último gran contrato. Con líneas rojas como las de Arabia Saudí, frustrando por sus valores y creencias un traspaso que habría reportado 20 millones a las arcas béticas, entiende el protagonista que ha llegado el momento de escuchar propuestas de fuera de LaLiga, especialmente de la Premier League y la propia Bundesliga. Pretendientes no le han faltado estos meses, a pesar de su mala racha. Ni siquiera ha descartado volver a ponerse a las órdenes de Manuel Pellegrini, lo que tendrá que hacer seguramente en el arranque de la pretemporada.