Las notas del Betis en su visita liguera al Almería

El ajuste realizado por Manuel Pellegrini ante el Celta sigue vigente. Es cierto que no sólo ese factor habrá influido en la fragilidad defensiva de un Betis solvente hasta el parón mundialista, exceptuando la visita a Mestalla, muy fuerte atrás, un déficit corregido felizmente por el 'Ingeniero' en los albores de la 22/23, pero que se volvió en contra con el avance de la competición. En un principio, se sacrificó cierta pegada con el cambio, pero la 'manta' se quedó cortísima cuando se secó la pólvora y estalló el 'polvorín' del área propia. En la última cita casera, el míster chileno recuperó nombres y estilo del curso pasado, volviéndose el partido de ida y vuelta, como los de antes, cuando la mayor calidad arriba de sus pupilos resolvía las más de las veces.

Contra los gallegos no hubo forma, porque Carvalhal tiene un filón igualmente con Aspas, Veiga y compañía, pero el plan, a falta de tiempos mejores, de acierto en las teclas pulsadas y de que hombres importantes que no están (numérica o deportivamente), suele funcionar contra equipos con menos argumentos, como el Almería, que quizás adolece de la falta de lo mismo que su oponente andaluz. Este sábado, sin ningún tipo de alarde, ganaron los heliopolitanos. Lo único realmente importante, ya que primaba detener la caída libre para reactivar las opciones de Champions League o, como poco, de volver a jugar en Europa de una escuadra necesitada de confianza, de volver a creer en lo que sabe hacer perfectamente, pero ya no le sale con tanta asiduidad.

Éstas son las puntuaciones de los verdiblancos ante el Almería:

RUI SILVA: 7

Ha pasado en poco tiempo de ser casi inexpugnable a que prácticamente cualquier tiro entre palos acabe en la red, incluso rebotando entre sus piernas, como en el 1-1. Se le ve tocado en su confianza, aunque se redimiría en la reanudación con una gran mano en el uno a uno con Luis Suárez, acción tras la que se vino arriba notoriamente, ofreciendo esa solvencia, por alto y en los reflejos por bajo, a la que tiene acostumbrada a la parroquia verdiblanca. Paradón a Babic previo al gol de Samú Costa.

SABALY: 4

Si fue de lo más entonado contra el Celta, esta vez dejó demasiados espacios a su espalda, algo contradictorio al no aportar mucho en sus subidas al ataque. Buen cruce abajo ante Embarba en la reanudación, pero poco más que reseñar.

PEZZELLA: 4

Le tocó medirse cuerpo a cuerpo con un delantero más rápido como Luis Suárez. En el 1-1 no pudo hacer más, porque le frena y le tapa lo que puede. Subió un puntito su contundencia para no pasar tantos apuros, aunque la zaga bética, en general, no es tan fiable como antes. El Bilal Touré le regateó con facilidad en una acción en la que se debió lastimar, pues fue sustituido poco después.

EDGAR: 5

Mucho mejor en la salida desde atrás que uno de sus fuertes, el juego aéreo, pero leyó bien la mayoría de los cruces, anticipándose cuando convenía o haciendo faltas tácticas para que hombres más habilidosos como Embarba no le superaran en carrera.

ABNER: 4

Apenas aportó en ataque hasta los riesgos asumidos por Rubi con el 2-3 y se mostró extremadamente blando en defensa, como ante Luis Suárez en la acción del 2-2. Sigue seguramente con el gol fallado a puerta vacía ante el Celta en la cabeza. A punto de hacer un golazo, que habría sido el de la sentencia, con su pierna mala en el minuto 84.

GUIDO RODRÍGUEZ: 5

No anda fino y, de manera indirecta, su bajón influye en la fragilidad defensiva que ha empezado a mostrar el equipo. Quedó dolorido al interponerse en un disparo de Melero y, desde ahí, se le vio renqueante. Tuvo el infortunio de desviar hacia su portería el balón que luego aprovecharía Luis Suárez para marcar. Sacó fuerzas de flaqueza en la segunda mitad, con alguna falta táctica valiosa, pero se le echa de menos muchísimo.

GUARDADO: 5

En la línea de Guido: voluntarioso, pero desatinado, llegando tarde demasiadas veces y siendo incapaz, en conjunto, de frenar las transiciones blanquirrojas en ataque. El cabezazo del 2-3 a la salida de un córner, ni mucho menos su especialidad, sirve de extraordinaria redención.

CANALES: 9

Cuando está inspirado y puede moverse con total libertad, lo que suele coincidir con las ausencias de un Fekir que también suele requerir esa ubicuidad, se nota. Indetectable para la defensa del Almería, a la que le costó un mundo pararle entre líneas. Tuvo el 0-1 nada más empezar y volvió a pillar la espalda a los centrales en el tanto de Rodri, donde se mostró muy generoso. Enorme su definición de vaselina, controlando con el pecho y sin dejar caer un servicio brutal del extremeño. Pese a que bajó su rendimiento, se echó el equipo a la espalda en el cuarto final de encuentro con un zurdazo lejanísimo que despejó a córner (el del 2-3, por cierto, que bota el cántabro) con apuros Fernando.

RODRI: 8

Está claramente para jugar más. No tenía una referencia de partida en la banda derecha, sino que se movió por todos lados, pidiéndola y asociándose con tremenda calidad. Abrió el marcador y eso redundó en su tranquilidad para destapar de par en par el tarro de las esencias, ése que a veces se queda inexplicablemente entreabierto. El pase a Canales en el 1-2 fue soberbio. Vino a recibir, la sacó jugada y, en general, mejoró todas las acciones en las que participaba, sacando faltas o generando ataques prometedores. Exhausto, bajó su nivel, como todos, en la reanudación.

JUANMI: 6

Definitivamente, ha dejado atrás su grave lesión de tobillo y, sobre todo, esas secuelas posteriores que le preocupaban para recordar al de antes. Buenas ayudas a su lateral, pero, sobre todo, en la presión alta. Con Borja se entiende con una mirada. Le anularon dos goles por fuera de juego que el VAR no demostró luego gráficamente, aunque el segundo era más claro. Siempre está en el sitio exacto para recibir o dar un pase definitivo. Con la voracidad que necesitan los de Pellegrini para reafirmar su candidatura a la Champions.

BORJA IGLESIAS: 5

Con el punto de mira desviado, el penalti convertido en Getafe no reactivó su pegada. Dos disparos al palo en el primer tiempo, el segundo de ellos, prácticamente a puerta vacía. Se lo toma con una sonrisa, pero, lógicamente, le afectará. En su descarga, cómo se sigue ofreciendo entre líneas, descolgándose para generar espacios, y cómo ve los desmarques de Juanmi, Rodri o Canales. Además, resultó crucial en los despejes por alto en defensa.

AYOZE: 5

Buenos desmarques, aunque le faltó cierta osadía para encarar. Mandó a las nubes una ocasión clara, a pase de Guardado, que habría sido la sentencia.

VÍCTOR RUIZ: 6

Suplió a un Pezzella previsiblemente tocado y trató de no confiarse en demasía tanto en pases como en cruces. Se lanzó bien al suelo para estorbar a El Bilal Touré cuando éste se preparaba para remachar un despeje de Rui Silva a tiro de Ramazani e impuso su veteranía por alto.

LUIZ HENRIQUE: 4

Por las pocas ganas que le echa cuando sale, debe haber razones de peso para que haya perdido la titularidad. Incluso, frenó alguna contra en superioridad de manera inexplicable. Debe despertar, porque alcanzó un nivel soberbio a principios de año.

MANUEL PELLEGRINI: 6

Saca lo mejor que tiene, está claro, porque nadie conoce mejor ese vestuario. Las sanciones y alguna lesión le dejan poco margen de maniobra. Está insistiendo en el plan del año pasado y en esa variedad de recursos que permite al Betis apretar arriba y hacer daño con las transiciones, manejar el juego cuando necesita remontar o ceder el balón al contrario sin remilgos si debe esperar para apuntillarle. En defensa, jueguen los que jueguen, sigue siendo frágil, en parte porque el doble pivote no funciona como antes.