Comienza una semana decisiva en Heliópolis. De un lado, el choque de trenes del sábado (16:15 horas) en el Santiago Bernabéu entre los dos colíderes de Primera división, Real Madrid y Real Betis, los únicos capaces de firmar un pleno en las tres primeras jornadas de campeonato. Pero antes, el jueves por la noche, los clubes con un descuadre salarial tendrán que ponerse en positivo o dejar fuera a algún hombre fundamental. Una situación delicada sobre la que llevan semanas (meses, en realidad) trabajando en la planta noble del Benito Villamarín ante la intransigencia de LaLiga, que miró para otro lado los dos cursos anteriores con la coartada de la pandemia. Ni el pacto con CVC ni las 'palancas' han bastado a la mayoría, por lo que tendrán que reactivar sobre la bocina los ingresos extraordinarios de antaño en materia de traspasos que la crisis económica derivada de la sanitaria congeló.
La última hora en verdiblanco cuenta con luces y sombras. Aquí varios han arrimado el hombro y otros, como poco, han tenido el gesto de proponerlo. De un lado, Ángel Haro y José Miguel López Catalán, para muchos los culpables por no haber previsto este problema, han avalado con su patrimonio personal hasta el 5% del presupuesto (por un máximo de 6,5 millones de euros) para reducir el desfase existente de unos 25 millones de euros. Luiz Felipe aceptó diferir en ejercicios posteriores el cobro de la prima de fichaje que le correspondía, al tiempo que Bartra se marchó a regañadientes al Trabzonspor a sabiendas de que ayudaba y pese a ser indiscutible para Manuel Pellegrini. Según desveló en 'El Pelotazo' el periodista Tomás Furest, Joaquín, que acompañó sin estar de alta a sus compañeros a Mallorca para hacer piña y mostrar su compromiso, se ofreció a retirarse anticipadamente, renunciando a la renovación firmada, para que el Betis se ahorrase su ficha.
No se ha contado, pero otras fuentes apuntan a que, como un accionista de referencia que es también, el gran capitán podría haber aprovechado, de confirmarse su adiós, para aportar de su dinero en pos de una solución en la que no tendría problema en colaborar el cuerpo técnico, que, como se publicó hace escasas fechas, ha visto recompensado su trabajo con un aumento de sueldo que habrían aplazado. La respuesta desde el vestuario ha sido de agradecimiento, mientras que desde los despachos de La Palmera se les ha hecho ver que ni siquiera con esos gestos (el de la aportación del portuense no sería siquiera posible, ya que no se puede avalar más del 5% en total) se llegaría al objetivo de poder inscribir a los que faltan. Quedan por enjugarse unos 11 kilos, por lo que, si no hay una gran venta de aquí a las 23:59 horas de este jueves, tocará convencer a varios de los descartes de que salgan y recaudar lo máximo posible.
Con Bravo, como avanza ABC, no habrá problemas. Ni siquiera la presunta oferta del Girona le ha hecho dudar, como ocurrió con Guardado y el interés expresado por América y Nottingham Forest. De hecho, la 'palanca' del patrimonio personal, por lo visto, bastaba para su inscripción, pero un problema de índole burocrática impidió que estuviese disponible ante Osasuna. Lo estará en Chamartín el sábado, porque su alta es cuestión de días, seguramente horas. Muchos más problemas hay con Willian José, porque la cuantía es bastante más alta que las demás, contando la amortización del fichaje y su salario (del segundo escalón del plantel). Tendrá que haber ventas, con el inconveniente añadido de que, si no suman 11 kilos o más, LaLiga aplica la regla del 1:4, permitiendo únicamente reinvertir un 25% del ahorro conseguido. Y, como ya se ha contado, aquí nadie quiere irse del colíder a las puertas de un Mundial y con una apasionante temporada con cuatro competiciones por delante. Otra vía, indeseada y en la que no se quiere pensar aún, es la cesión del hispano-brasileño, con el Villarreal y algún otro club, también de fuera, interesados.
Tras la negativa de los que tienen más caché en el mercado (Álex Moreno, William Carvalho, Guido Rodríguez), todo pasa por convencer a los descartes, especialmente Loren y Paul, por los que se podría recaudar parte de lo necesario. Se da por hecho que Camarasa no tendrá ficha al menos hasta enero de 2023 y aún habría que prescindir seguramente de Montoya o ceder a otros como Dani Martín, porque Rodri y Rober son necesarios para ocupar las plazas de la lista B de la UEFA. Muchos movimientos pendientes en estas tres jornadas y media que restan de ventana estival de transferencias.