Suma dos sesiones ya con el grupo, por lo que estará disponible este domingo ante el Real Madrid, después de dos semanas K.O. Un fastidio para Rui Silva, que se encontraba en un gran momento de forma, como demostró en Almería con varias intervenciones de mérito para ayudar en el triunfo de su equipo, primero de los tres consecutivos que acumula para refrendar su apuesta por la Champions League. Con opciones, por tanto, de desbancar de nuevo a Claudio Bravo, el portugués hace balance de su etapa en España y se decanta, puestos a hacer comparaciones, con el torneo que más le gusta, habiendo probado la Primeira Liga y LaLiga, así como el delantero que más le ha costado parar en su incipiente carrera, teniendo en cuenta que 'sufrió' a Cristiano Ronaldo en los entrenamientos con la 'seleçao' y que, con los nazaríes y el Real Betis, tuvo enfrente ya a artilleros de talla mundial como Benzema, Messi o Lewandowski.
"Granada fue muy importante para mi crecimiento. La fase inicial, como he dicho, fue bastante difícil; pasé los primeros cinco meses sin jugar, sin poder debutar. El equipo no iba bien y bajó de categoría. Al año siguiente, tenía la expectativa, a pesar de estar en Segunda, de jugar y dar la cara. Acabé sufriendo con la transformación del club: nueva plantilla, el nuevo entrenador no me conocía de nada... Eso tuvo su peso, porque jugué muy poco. Al año siguiente, nueva transformación, pero con un cambio a un entrenador que confió en mí. Y gracias a él estoy donde estoy hoy. Diego Martínez fue quien confió en mí el año que subimos a Primera", relata el cancerbero en un entrevista con 'A Bola', donde se moja sobre la distancia que existe entre su país y el que lo ha acogido: "Hay grandes diferencias, empezando por los presupuestos; los clubes son totalmente distintos. Y, en el aspecto deportivo, los estadios siempre están llenos. Recuerdo jugar en Portugal, en el Choupana y en otros estadios, con 1.000, 1.500 o 2.000 personas... Aquí es impensable, ni siquiera en Tercera división. En el Benito Villamarín siempre se roza el lleno. Pero también se ve que hay mucha calidad en el campo, intensidad... Los tiempos de juego en Portugal... El partido sufre constantemente parones y rupturas de ritmo. Esta mentalidad tiene que cambiar en el fútbol portugués. Jugar en los mejores estadios y contra los mejores equipos es gratificante".
En clave selección, recuerda su debut en un amistoso contra Israel en junio de 2021, hasta la fecha su única participación con la camiseta nacional, aunque estuvo en la Eurocopa 2020 y contó a principios de la última Nations League, si bien le queda estrenarse esta temporada, ya con relevo en el banquillo. Tanto este cambio de entrenador como la competencia bajo los palos del combinado luso lo lleva el bético con suma naturalidad. "Tuve la oportunidad de estar en la última Euro, que fue muy importante para mi carrera y para mi palmarés, pero también está en mis planes de futuro volver a otra e ir a un Mundial. Pero lo más importante ahora es centrarme en el Betis y jugar regularmente en el club, hacer buenas actuaciones, porque eso es lo que hace que me llamen. Ése es el objetivo. Y, ahora, ver el ejemplo de mis compañeros campeones del mundo... Es algo inolvidable, y es posible; quedará marcado para siempre", apunta con envidia sana, al tiempo que alaba a sus competidores.
"Rui Patrício es una referencia para nuestro país y para mí cuando empecé como portero. Un arquero de gran calidad. Empecé mi carrera viéndole imponerse, y mis características se parecen un poco a las suyas; amigos y familiares me decían que me parecía a él. Y tener la oportunidad de compartir vestuario y aprender de él en los entrenamientos fue sin duda importante para mí. ¿Diogo Costa? ¡Es fantástico! Tiene un enorme margen de progresión y una velocidad superior a la media. Un portero ya maduro y con experiencia, porque puede jugar en la Liga de Campeones y en un Mundial, defendiendo a un equipo con la importancia del Oporto, ganando títulos. Eso le dará todo lo que necesita para ser un portero aún mejor", añade Rui Silva, que espera que el relevo de seleccionador le abra de nuevo las puertas: "Mi relación con Fernando Santos es muy buena, sin duda; es el entrenador que apostó por mí, que me convocó para una gran competición, que me hizo debutar y me hizo cumplir un sueño de infancia. Siempre le estaré agradecido; no me arrepiento de nada y le deseo lo mejor. Dio mucho al país y quedará grabado para siempre en el corazón de todos los portugueses. Roberto Martínez abrirá las puertas a muchos jugadores; creo que es una buena elección".
En este sentido, el ex de Nacional de Madeira pudo recientemente "hablar con él en las fechas de la Supercopa de España, en Arabia Saudí", cuando el aragonés fue a conocerlos a la concentración previa al duelo de semifinales contra el Barcelona: "Vino a saludarnos a William (Carvalho) y a mí, y parecía dispuesto a trabajar con una gran relación con los jugadores, con cercanía, y eso es fundamental. Llegar y hablar con los jugadores es sin duda importante, y esa imagen inicial es crucial para lo que puede ser el futuro de la 'Seleção'. Tenemos un grupo con un talento enorme que puede hacer cosas extraordinarias y ganar títulos. Y el entrenador puede ayudar tanto en el aspecto humano como en el técnico y en el táctico". Hablando de talento, por cierto, Rui Silva fue invitado a decantarse por el delantero que más complicado se lo ha puesto en un terreno de juego. Y tiene con quién comparar, pues ha tenido a Cristiano Ronaldo en los entrenamientos con Portugal: "Hay unos cuantos... Destaco a Benzema, para mí el delantero más completo del mundo; también a Messi, por encima de la media, imprevisible, nunca sabes lo que va a salir de ahí; y Lewandowski tiene gran envergadura, disponibilidad física y clase; intimida, sin duda".