Álex Martín4 min lecturaDani Olmo se ha convertido en uno de los grandes protagonistas del mercado de fichajes. El futbolista español, flamante campeón de la Eurocopa con el combinado nacional, se ha convertido en la gran prioridad del FC Barcelona para reforzar su plantilla, sin dejar de tener en cuenta a clubes como el Bayern o el Manchester United, que sueñan con hacerse con sus servicios. Sin embargo, parece que el cuadro culé, muy insistente, es el mejor posicionado a la hora de hacerse con un refuerzo que les puede permitir crecer sobremanera en todas las competiciones. Este es el gran objetivo de los de la Ciudad Condal, que le ven como su nueva esperanza.
Tras reunirse en Zagreb con su representante, Dani Olmo ya se ha puesto en marcha. Se dirige a Alemania, donde está citado con su equipo, el RB Leipzig, el próximo jueves, ocho de agosto. Apurará sus vacaciones, mientras que su agente tiene ‘deberes’, ya que su objetivo no es otro que el de acelerar y conseguir progresos significativos en las negociaciones entre el equipo azulgrana y el conjunto de las bebidas energéticas.
Tal y como apunta Mundo Deportivo, las personas que representan a Olmo estarían trabajando en la segunda oferta que ha puesto encima de la mesa el Barça. Esta consistía en un pago de 47 millones de euros fijos, tres en variables de “fácil cumplimiento”, que residirían en los encuentros que disputaría el jugador con la camiseta blaugrana, además de otros 10 en el caso de que el club se hiciera con la Liga de Campeones o el torneo de la regularidad durante la etapa en la que el internacional español militara en el cuadro que disputa sus encuentros en el Camp Nou.
Sin respuesta aún por parte de los dirigentes del RB Leipzig, no se demorará demasiado la contestación de los ejecutivos, ya que este domingo volvieron a Alemania procedentes de los Estados Unidos y tienen en su agenda abordar este asunto, de suma importancia para todas las partes involucradas.
Por parte del jugador, la postura es clara: quiere jugar en el FC Barcelona y su idea es abandonar el RB Leipzig este verano. Quiere volver a formar parte del equipo en el que se formó, y se encuentra ya en Alemania esperando acontecimientos. Los germanos le respetan, pero, a cambio, quieren obtener una cantidad justa y que encaje con sus pretensiones. Teniendo en cuenta que el Barça trabaja por solventar otro punto de fricción, que son las formas de pago, ya que ofrece pagar en septiembre cerca de 25 millones de euros, esta situación se puede resolver en las próximas semanas.