Alvaro Arenillas3 min lecturaEl 'Caso Negreira' sigue levantando mucho más que polvareda. Al escándalo en sí de conocer que el Fútbol Club Barcelona ha estado pagando cantidades ingentes al ex vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, Enríquez Negreira, se suma ahora un camino más largo, el de esclarecer los hechos y ver las repercusiones que tienen estos en el presente.
La Real Federación Española de Fútbol ha señalado que se personará en los "posibles procedimientos judiciales" del 'caso Negreira'; es decir, tienen interés en investigar y que todo lo acontecido salga a la luz. Es justo este hipotético proceso el que podría haber beneficiado al Sevilla Fútbol Club. Si bien el presidente de LaLiga, Javier Tebas, ha dicho que "no es posible que existan sanciones disciplinarias deportivas" contra el Barcelona, igualmente se abre una pequeña rendija a que la justicia acabe determinando otra cosa; eso sí, es prácticamente imposible al haber pasado tres años desde el presunto delito.
Para ser exactos, estaríamos hablando de las cuatro finales que el Sevilla FC perdió en los años 2016 y 2018; es decir, dos Copas del Rey y dos Supercopas. Tal reclamación habría tenido su recorrido si el escándalo se hubiese destapado años antes. En ese contexto ya irreal, todo hubiese dependido de que quedase demostrado el pago del club catalán al Comité Técnico de Árbitros para, supuestamente, influir en las decisiones arbitrales. Si se hubiese llegado antes a ese punto, los nervionenses (y otros equipos como Real Madrid y Atlético de Madrid) podrían haber realizado el pertinente recurso para sumar otros trofeos a sus vitrinas.
El Barça evitará las sanciones deportivas
Esta es una de las preguntas que parecen ya resueltas. Javier Tebas ha explicado que al haber pasado más de tres años los posibles delitos han prescrito; sin embargo, está por ver el recorrido que tiene el 'Caso Negreira' y si en última instancia se decide algún tipo de sanción no deportiva para un Barcelona que se ha ceñido a un comunicado oficial en el que expresa que la relación y los pagos con el ex vicepresidente del CTA se debe a lo siguiente: "Informes técnicos relacionados con el arbitraje profesional a fin de complementar información requerida por el cuerpo técnico del primer equipo y del filial, una práctica habitual en los clubes de fútbol profesionales".
Pueden tener razón y puede que el objetivo fuera solo ese, pero pagar por ello 1,6 millones de euros entre 2016 y 2018 suena igualmente extraño. Los árbitros por su parte se defienden por voz de Luis Medina Cantalejo. Sabemos algunas cosas, pero está claro que restan otras por descubrir.