Muchos frentes abiertos tuvo que manejar Ernesto Valverde en el Mallorca-Athletic disputado hoy. Ya en la previa del encuentro, al técnico del conjunto vasco se le vio molesto con las declaraciones que había hecho Javier Aguirre sobre el retorno de Galarreta a San Mamés en cuanto finalice la presente campaña. El mexicano confirmó su no renovación con el conjunto balear y su fichaje por los 'leones', mientras que el extremeño optó por no hacer declaraciones al respecto.
Y menos mal que no las hizo, porque de lo contrario podría haber alimentado aún más la polémica del partido al finalizar el mismo, ya que fue el propio Galarreta quien terminó dándole un punto en su visita a Son Moix con una mano clara en el último suspiro del partido.
Desde la sala de prensa, el 'Txingurri' decidió jugar el partido que tenía en su cabeza. Y en el escenario bemellón, optó por 'castigar' a Unai Simón tras el partido disputado en San Mamés contra el Sevilla. Su decisión de sacarla jugada desde atrás en los últimos compases del envite propició, a la postre, el penalti que transformó Ocampos y que dejó al cuadro vasco sin sumar. Y hoy le ha dado un toque de atención al internacional español. Pese a estar en condiciones óptimas ha puesto en el 'once' a Aguirrezabala, que hasta el momento había intervenido siempre por la lesión del primero. Y esta decisión no le ha salido nada mal al preparador cacereño. El joven cancerbero tuvo poco trabajo, pero salvó un mano a mano con Muriqi con el 0-0 en el marcador fruto de su rapidez. Eso sí, en el gol balear pudo hacer algo más.
Y, por otro lado, pensando en el frenético calendario que están teniendo en esta recta final del campeonato, Valverde decidió hacer rotaciones en Mallorca, quizás anticipándose a la final del jueves contra el Betis. Dejó suplentes, entre otros, a Óscar De Marcos y Nico Willams. Y viendo que el partido estaba muy atascado, decidió meter al menor de los hermanos tras el descanso en detrimento de Guruzeta, titular hoy ante la baja del sancionado Sancet. Y el partido cambió radicalmente. Raúl García pasó a ejercer de 'killer' y los Williams comenzaron a nutrirle de balones. Y en el último suspiro, en una de estas, llegaría la acción polémica del partido que terminó con la pena máxima transformada por Iñaki Williams para empatar la contienda y darle un punto de oro al Athletic en sus aspiraciones por entrar en Europa la próxima campaña.
El 'Txinguriri', ante los micrófonos de DAZN, respondía así sobre si se arrepentía de haber hecho tantos cambios en su equipo con respecto al último partido: "No me he arrepentido de ponerlos suplentes porque venían con cansancio y podíamos correr un riesgo de lesión. Y por eso lo he hecho". Esas fueron todas sus explicaciones, pero lo cierto es que hoy el Athletic perdió en Son Moix una oportunidad inmejorable para haber dado caza al Betis en la sexta plaza, rival al que se medirán este jueves en San Mamés.