David López, centrocampista del
Lugo, ha pronosticado que el equipo gallego, al que se unió el pasado verano, puede hacer "muy bonitas cosas a corto o medio plazo" y ha admitido que ese objetivo fue el que le sedujo.
"A corto o medio plazo pueden hacer muy bonitas cosas y por eso vine", reconoció el futbolista en una entrevista a La Liga TV que recoge Efe.
"Desde el primer día en el
Lugo fue impresionante. No solo el club, sino la afición, los compañeros, todo el mundo. Es un club humilde que ha hecho las cosas bien y que va creciendo. Estamos en zona tranquila y queremos sumar puntos para conseguir el objetivo de la permanencia cuanto antes", añadió.
El extremo se mostró "encantado" con su técnico,
Quique Setién, del que ya tenía referencias y del que comentó que es "muy cercano y buen entrenador".
El preparador cántabro le ha pedido "que ayude mucho al equipo, que coja el mando también cuando el equipo esté en apuros" y eso es lo que ha intentado en los 25 partidos en los que ha participado y en los que ha visto puerta tres veces.
El jugador riojano llegó al
Lugo esta temporada después de haber jugado las dos anteriores en la
League Championship, segunda división inglesa, con el Brighton.
"Después de dos años en Inglaterra, me apetecía volver a la
Liga española. No había jugado en la
Liga Adelante, y en lo que va de año estoy muy contento, es una liga muy competitiva y en la que estoy disfrutando mucho", señaló.
La categoría de plata del fútbol español le recuerda a la segunda inglesa, especialmente esta temporada en la que hay muchos clubes históricos de
Primera División.
"La
Championship es muy competitiva y el nivel con la
Premier League es muy parejo. Los clubes de Championship son históricos de Premier. En la
Liga Adelante, ahora mismo, ha coincidido un poco eso, hay muchos históricos y este año es muy parejo a la Championship. Está muy igualada", dijo.
David López repasó su carrera, su formación en el
Atlético Osasuna, con el que llegó a Primera División en el primer lustro de la década pasada, y su etapa en el
Athletic de Bilbao, al que estuvo ligado entre 2007 y 2012.
"Tengo buenos recuerdos en los dos sitios. A
Osasuna fui con 17 años, me hicieron como persona y futbolista y los tres años en el primer equipo coincidieron con los mejores del club. Y en el
Athletic, lo mismo. Conseguimos llegar a una final de
Copa mucho tiempo después, a otra de
Liga Europa, y todo son buenos recuerdos", explicó.
El centrocampista confesó que "la derrota más dolorosa" de su carrera fue la final de la
Copa del Rey de 2005 con
Osasuna: "Perdimos contra el
Betis en la prórroga. Fue muy dolorosa", recordó.
Y también "la primera final de Copa con el
Athletic" (2009), a la que el equipo vasco accedía "24 años después". "La afición y la ciudad estaban con muchas ganas de poder conseguir el título. Fue una derrota importante", opinó.