Hamari Traoré ha sido vinculado en las últimas semanas tanto a
Sevilla FC como a
Betis. Desde Francia apuntaban que el lateral maliense era uno de los objetivos que venía siguiendo Monchi paran inyectar competencia a una posición donde Lopetegui sólo cuenta con
Jesús Navas, pero también que el Betis se había fijado en el internacional del Stade Rennais ya que los heliopolitanos necesitan reforzar el carril diestro para la próxima temporada, en la que Barragán acaba contrato y en la que la continuidad de
Emerson, pese a tener contrato hasta junio de 2021, está amenazada por un Barcelona que no descarta pescarlo antes de tiempo.
Traoré
acaba contrato en 2021 con el Rennes y, a sus 27 años, se encuentra ante la oportunidad de dar un salto en su carrera, después de firmar una gran campaña con el club bretón, con el que ha firmado un gol y cinco asistencias en 37 partidos, pudiendo desenvolverse también como extremo y a pierna cambiada en la izquierda.
Sevilla y Betis no son los únicos que le siguen. Es más, poco tendrían que hacer si el
París Saint-Germain, otro de los interesados, se decide a mover ficha y apuesta por el de Bamako como relevo de
Meunier.
El conjunto rojinegro ya se está haciendo a la idea de que será difícil retenerlo un año más y han comenzado a buscarle un sustituto: el también maliense
Falaye Sacko, lateral derecho del Vitoria de Guimaraes, con contrato hasta 2024.
Con un valor de mercado de 4,8 millones, según Transfermark, el jugador al que siguen desde la capital hispalense tampoco descarta renovar con el Rennes, clasificado para la próxima edición de la Liga de Campeones, por lo que a día de hoy su futuro es toda una incógnita y tanto
Sevilla como
Betis permanecen atentos a los movimientos que se pudieran dar.