Viernes de Dolores para el
Granada CF, que se fue de vacío del Ramón Sánchez-Pizjuán en el primero de los dos derbis andaluces de esta jornada 31 de
LaLiga. Porque este Sábado de Pasión, antesala de la Semana Grande por excelencia en esta benidta tierra, llegará una exaltación de emociones en el Nuevo Mirandilla (vamos el Carranza de toda la vida al que la política le ha hurtado su nombre), con el necesitad
Cádiz CF y el embalado
Real Betis como opuestos protagonistas. Por todo lo bajo, un
desengaño para los nazaríes y una
oportunidad para los amarillos. Por arriba, los nervionenses obtuvieron su redención, con suspense y nocturnidad, para volver a mirar hacia arriba y no hacia abajo. Por donde aprietan (y apretarán más si salen con una sonrisa de la 'Tacita de Plata') los heliopolitanos.
Porque en
Semana Santa habrá dos platos fuertes. Sin aperitivos, que
Eintracht de Frankfurt y West Ham United privaron a los nuestros de un Jueves Santo en pos de las semifinales de la
Europa League. Otro año será eso de exportar el olor a incienso y las marchas procesionales a otros rincones del Viejo Continente. Mientras tanto, duelos directísimos por la
Champions League, empezando el
Viernes Santo en la otrora Anoeta, con la
Real Sociedad y los de
Manuel Pellegrini como actores principales. El
Domingo de Resurrección, los de
Julen Lopetegui recibirán al Real Madrid, un líder que a veces parece divino, inalcanzable, pero que otras se hace carne y se antoja mortal. Nada está escrito definitivamente, aunque puede quedar para los restos, dependiendo el marcador que se registre unas horas después de que la
Virgen de la Aurora certifique que la magia se va a dormir hasta 2023.
Fuera de nuestra tierra,
Dani Alves saca pecho en la Ciudad Condal por su
Barcelona, que descolló tras una fase de transición a las órdenes de
Xavi Hernández que aprovecharon, entre otros, el Betis para bajarle los humos. Los culés fueron terrenales en tierras alemanas, pero todo indica que fue un respiro para coger fuerzas. No les dará tiempo, seguramente, a meter miedo a un conjunto merengue que sigue a lo suyo: pisó el acelerador en la UCL para avanzar en busca de su 14º título.
Athletic y Villarreal se disputan también la cabeza de ratón, la primera plaza entre los acosadores oficiales del queso que, a la cola del león de momento, saborean en La Palmera y San Sebastián.
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