Andalucía es una tierra conocida históricamente por sus pintores, sus poetas o sus músicos. También por sus deportistas. Es una tierra prolífica de atletas y campeones mundiales, tales como Carolina Marín, Lourdes Mohedano o Sergio Ramos. Además, tal y como se puede advertir, no solo destacan en una faceta deportiva. Sin ir más lejos está el caso de Alfonso Cabello en el ciclismo. En este sentido, el ciclista cordobés es uno de los más destacados a nivel internacional. En ESTADIO Deportivo, hemos tenido una charla con él para conocerlo en profundidad.
- ¿Cómo son los entrenamientos que haces? ¿Son aquí en Andalucía o en otro lado de España?
- Actualmente vivo en Pozoblanco, aunque también viajo mucho a Murcia. Entreno en ambos sitios y mis entrenamientos suelen ser entrenamientos totalmente distintos a lo que hace cualquier otro ciclista. Yo compito en pista, en una especialidad de velocidad, que apenas dura un minuto, es un kilómetro a contrarreloj (dónde él tiene el record). Entonces aquí en Andalucía carecemos de instalaciones deportivas acorde a las competiciones a las que yo asisto. No tenemos Velódromo de primer nivel, incluso de segundo ni tercer nivel. Es una instalación casi inexistente y las que existen son totalmente dejadas.
Por lo tanto, tengo que hacer una preparación paralela en carretera pero adaptada, tanto en tiempo como en intensidad, a la disciplina que yo hago. Igual un entrenamiento duro para mí es un entrenamiento de 40 minutos en carretera, en los que hago 30 series de 30 segundos.
Luego, tengo los típicos entrenamientos de fondo que hacen todos los ciclistas pero esos no me hacen mejorar. Cuando se acerca la competición, la puesta a punto la tengo que hacer en un Velódromo, o bien voy a Valencia, o a Portugal o Palma de Mallorca, en el Palma Arena, son los cuatro Velódromos en los que más suelo entrenar para preparar las competiciones en las mejores competiciones.
Pero, como digo antes, no dispongo de Velódromo cerca de casa, entonces tengo que entrenar en carretera. Al final, se trata de intentar, con lo que tenemos, sacarle el máximo partido posible. Yo, como no tengo Velódromo, muchas veces entreno en la carretera con la bici de pista, en polígonos cuando no hay tráfico. Se trata de salir de tu zona de confort y luchar por lo que necesitas, a pesar de no tener Velódromos disponibles para entrenar.
- A pesar de no tener esas instalaciones, lo que sí hay son unas buenas condiciones climáticas aquí y unos buenos terrenos para entrenar, ¿no?
- Aquí se está muy bien, en la parte de Córdoba donde yo vivo hay poco tráfico, carreteras muy buenas. Hay mucha cultura ciclista en general, se respeta mucho al ciclista y yo me siento realmente cómodo cuando salgo a entrenar. Aquí somos pequeñitos, todos me conocen y me dan facilidades.
Todo lo que necesito, si necesito ir a un gimnasio, si necesito hacer una serie en un polígono, mismamente en la puerta de casa, que tengo una carretera general, tengo marcadas varias distancias con cintas de suero y cuando la gente me ve, me respeta. Entienden que soy deportista profesional, que estoy entrenando y que a pesar de no contar con las condiciones idóneas, estoy haciendo mi trabajo y todo el mundo me saluda, todo el mundo me muestra su respeto cuando me ve entrenando y eso me enorgullece.
- ¿Se ha sentido apoyado por Andalucía, por la Junta de forma económica o en cualquier otro aspecto durante tu carrera deportiva?
- Al principio de mi carrera deportiva he tenido varios impases, para ser justos. Al principio de mi carrera deportiva fue fundamental el apoyo de la Junta de Andalucía con un programa que se llamaba Fundación Andalucía Olímpica (FAO) porque sin ese dinero no hubiese podido plantearme el hecho de salir a competir fuera y mis padres no podían llegar económicamente a lo que yo necesitaba.
Entonces, previo paso a ser deportista dop del Comité Paralímpico y estar obligado por el Comité Paralímpico, la Fundación Andalucía Olímpica fue crucial para mí en el sentido del deporte, en el poder permitirme comprar un material deportivo mejor, el poder permitirme salir a competir fuera para que la Selección Española viese que yo realmente tenía un nivel deportivo como para que me convocase, para mi fue eso un papel fundamental.
Luego, cuando pasé a ser un deportista dop, allá por el 2010-2011, tuve varios años en los que el apoyo en la Junta de Andalucía fue inexistente. Había un vacío ahí en el que si eras un deportista dop, no podías formar parte de la Fundación Andalucía Olímpica y era lo único que había, no había otra cosa. Pero, sin embargo, desde 2016-2017 en adelante, han cambiado muchísimas cosas en la Junta de Andalucía con el cambio de Gobierno, yo creo que en el ámbito deportivo se ha mejorado una barbaridad
. Ahora sí hay un apoyo completo, desde el deportista que sí quiere ser olímpico y tiene resultados para poder merecer dar el salto, si es olímpico o si es paralímpico, como que también se está cuidando a los deportistas que ya formamos parte del programa olímpico y del programa paralímpico. Antes había una parte que estaba mirada y otra parte los deportistas que ya estábamos consagrados, consolidados y que teníamos resultados y no había ningún tipo de ayuda y ningún tipo de facilidad.
Ahora, actualmente sí hay cosas como becas Olimpus, hay un programa de charlas que se llama Mentor 10, en el que yo por ejemplo, soy uno de los mentores que hacen ese tipo de charlas. Está todo organizado por la Junta de Andalucía y está vinculado al deporte. Con este programa, se intenta llegar a deportistas que están en edad escolar. Con esfuerzo y constancia se puede llegar a deportista de alto nivel y ese es uno de los cometidos de ese programa y tiene un doble fondo: ayudar al deportista en este caso que hace el proyecto y también dar a conocer que la jornada del deporte, la importancia que tiene compaginar el deporte y el estudio. Yo creo que se están haciendo las cosas bien, aún hay mucho camino por recorrer y bueno, actualmente me siento apoyado por la Junta de Andalucía.