El Betis Baloncesto, también a puerta cerrada

Todos los partidos de la Liga ACB se jugarán a puerta cerrada durante las dos próximas semanas tras la resolución del Gobierno, atendiendo a las medidas decretadas por el Ministerio de Sanidad para frenar el avance del coronavirus. Una decisión que afecta al Real Betis en tres partidos: Zaragoza (fuera de casa), Obradoiro (en casa) y Estudiantes (fuera de casa).

Es decir, las dos jornadas que siguen más el encuentro frente al conjunto colegial, que tuvo que ser adelantado en su día al miércoles 25 de marzo por la ocupación ese fin de semana del Wizink Center. En consecuencia, las jornadas 24 y 25 de la competición y los encuentros aplazados previstos para el 18 y el 19 de marzo, amén del citado entre Estudiantes y Betis, se celebrarán con el mínimo personal imprescindible para la disputa de los partidos y su producción televisiva, sin posibilidad de acceso para aficionados.

La ACB mantendrá un contacto permanente con el Ministerio de Sanidad y el Consejo Superior de Deportes para atender sus recomendaciones, atendiendo los criterios de salud de aficionados, jugadores, entrenadores, árbitros, trabajadores de los clubes y representantes de los medios de comunicación.

Su rival pasa en Champions
El primer rival del Betis este sábado, el Zaragoza, llevará en su alforja el cansancio por el compromiso continental de este martes.

Y es que el conjunto maño resucitó en el último cuarto del segundo partido de la eliminatoria de octavos de final de la Liga de Campeones para llevarse un sufrido triunfo contra el Lietkabelis lituano y lograr la clasificación para cuartos (88-90).

El equipo 'rojillo' vivió un enfrentamiento en el que tardó demasiado en encontrar un equilibrio entre ataque y defensa, y para su fortuna lo hizo mediado el último cuarto, en el que volvió a ser el equipo intenso en defensa y acertado en ataque que está mostrando durante la presente temporada, tanto en la Liga española como en el torneo continental. Así, el local Martynas Sajus cometió una falta en ataque a falta de 4.7 segundos para la conclusión que certificó la victoria del próximo rival bético.