La asistencia a la
ACB crece un 8,3% en esta campaña. Pese al aplazamiento de dos partidos, hasta febrero, 1,3 millones de personas acudieron a un partido de la
Liga Endesa, lo que supone 100.000 aficionados más que en las 22 primeras jornadas de la temporada 18/19, con una media de 6.671 seguidores por encuentro, según un estudio realizado por Palco23 a partir de los datos facilitados por la competición.
Unos datos que son globales y a los que han contribuido notablemente los grandes pabellones y en los que también habrá tenido mucho que ver el crecimiento de la competición este año, con mayor nivel en los equipos, y los logros de la selección española. Pero también el interés de unos aficionados que estaban deseando de regresar a los pabellones, como parece ser el caso de Sevilla.
A tenor de las entradas que se han visto en
San Pablo en las últimas jornadas, lejos parecen esas últimas temporadas en las que el pabellón de la capital andaluza aparecía desangelado. Una inercia que se intuía tras las tres primeras jornadas, pero que cambió a partir de la visita del
Barça. Ya son ocho partidos donde las entradas apenas han bajado de los 5.000 espectadores, alcanzando casi el lleno en el duelo andaluz y ante el
San Pablo Burgos. Este apoyo ha ayudado a que el
Betis haya ganado ante los suyos tres de los cuatro últimos duelos caseros. La afición al básquet vuelve a
Sevilla.