Sin nada que perder y con el plus de motivación que siempre ofrece la visita de un grande. Así afronta esta tarde-noche el
Real Betis su encuentro en
San Pablo frente al todopoderoso
Real Madrid. Un equipo blanco que arriba a la capital hispalense después de vencer el pasado jueves al
Olympiacos por 93-77 en la Euroliga, en la que encadenó su octava victoria consecutiva liderado por un inspirado Fabien
Causeur (18 puntos en 17 minutos). El técnico verdiblanco,
Curro Segura, cuenta con todo el plantel disponible para desafiar a la lógica. Situación diametralmente opuesta a la de Pablo Laso, con varias dudas en cuestiones de enfermería.
No en vano, se espera que
Felipe Reyes esté dos semanas de baja, mientras que
Sergio Llull tuvo una pequeña recaída y estiró unos días más la recuperación de su lesión. En cambio,
Salah Mejri siguió entrenando y, tras dos meses parado, podría regresar tras vestirse y estar disponible en el partido continental de esta misma semana. Por su parte, el joven base
Juan Núñez, que ha ayudado en los entrenamientos estos días, podría ser la gran sorpresa sobre el parqué sevillano.
El cuadro verdiblanco afila sus garras para intentar hacer daño a un equipo merengue que ya ha pinchado fuera de casa este curso, pero que sin duda querrá aprender de su tropiezo en canchas como Bilbao o Zaragoza. Precisamente ese es el camino que deberá seguir el Betis para tratar de pescar un triunfo. Intensidad, defensa, acierto y un poco de suerte. Esa es la receta que cocinará la plantilla bética, un grupo que espera estar espoleado por la afición de San Pablo. Segura sabe de las complejidades que conllevan este tipo de partidos, pero confía en que se muestre la misma cara que se ha visto en casa durante todo el curso, un equipo con mucha hambre, fe y actitud.
No obstante, los hispalenses no pueden bajar la guardia en ningún momento frente a un Real Madrid que sacó el jueves de nuevo el rodillo en el WiZink Center para sumar la octava victoria seguida en la fase regular de la Euroliga, a costa de un Olympiacos en horas bajas, una racha que crece en casa y mantiene a los de
Pablo Laso a rebufo del líder en solitario
Anadolu Efes en la competición continental. Un momento de forma que obligará a los verdiblancos a poner toda la carne en el asador en un San Pablo en el que se espera una buena entrada dada la entidad del rival.
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