El
París Saint Germain arrastra problemas en el
lateral derecho y ha tocado a la puerta del
Real Betis para sondear la posibilidad de
Emerson, que acabaría su préstamo en la capital hispalense y regresaría en junio a la disciplina del
F.C. Barcelona, club con el que tiene contrato hasta 2024.
Aunque podría tratarse de un
movimiento más encaminado a una teórica incorporación en el mercado estival, y por tanto a sentar las bases de un
seguimiento en los próximos meses, no se descarta que el club galo pretenda acelerar el proceso y requerir de sus
servicios ya en esta ventana de fichajes.
Con
Florenzi en calidad de cedido por la Roma y el canterano
Colin Dagba sin convencer al cuerpo técnico, al
PSG le urge reforzar el carril diestro, por lo que el de
Sao Paulo se presenta como una oportunidad de mercado para los parisienses.
Al
Betis, sin embargo, le interesa más dar salida antes a jugadores como
William Carvalho, por el que beben los vientos en su país, o
Borja Iglesias, que no ha rendido al nivel esperado desde su llegada al Villamarín.
El brasileño también tiene el hándicap del
overbooking que se presenta en el lateral derecho en Can Barça, donde algunos de los aspirantes a presidir el club han tanteado a jugadores como Héctor
Bellerín.
De cerrarse el
traspaso en este mercado de
fichajes (el Barcelona tendría que dar su OK), ambas entidades se repartirían al 50 % los
ingresos. Si no, el Barça tendría que devolver/perdonar al
Betis los seis millones que le está abonando en tres plazos hasta el próximo verano y entregarle otros seis (tres de penalización por sacarlo antes del 30 de junio y tres por
formación ya pactados). En cualquier caso, el Betis conservaría el 10-15 % del montante final y en la Ciudad Condal les sale más a cuenta que la
operación se concrete ya a partir del verano próximo.