Alejandro Pozuelo salía del
Betis en el verano de 2013 rumbo a la
Premier, concretamente al
Swansea, a cambio de medio millón de euros. Tras ello pasó por el
Rayo Vallecano y se marchó a
Bélgica en 2015 para jugar en las filas del
Genk. En el
Luminus Arena se ha convertido en un auténtico valuarte y capitán del conjunto belga, del cual parece que se despedirá a finales del presente curso.
El sevillano ha concedido una entrevista a
Mundo Deportivo, en la cual repasa su actualidad en estos momentos, desde la situación que atraviesa el club belga hasta su futuro dentro de unos meses.
Para comenzar repasaba el estado del
Genk y de como se siente al haber llegado a la final de la
Copa de Bélgica: "Cuando nos metimos en semis piensas en que la tercera ha de ser la vencida y tuvimos la suerte de pasar a la final. Es un momento emocionante para el club, porque la
Copa es muy importante. Aunque hay que tener tranquilidad. Cuando se vaya acercando el partido y el momento empezarán un poco a aparecer los nervios".
Además, piensa que al final de la presente campaña puede ser el momento de volver a
España: "Está claro que es una ilusión personal y de mi familia. Tengo dos niños, somos de una cultura que necesitamos el calor y relacionarnos con la gente. Yo estoy muy contento pero para mi familia creo que hay que dar un paso más. En verano intentaremos hablar con el club y ver lo que pasa".
En cuanto a dicha salida, no ve con malos ojos volver al
Betis: "Si que ha habido un feeling desde pequeño. Salí del
Betis para ir al
Swansea. Ahora mismo hay una directiva muy buena, con una filosofía muy diferente a la que había hace años cuando salimos quince jugadores. El
Betis está haciendo las cosas muy bien. Los canteranos renuevan. Sería una ilusión grandísima alguna vez volver a cruzarme en el camino del
Betis. En el fútbol nunca se sabe. Yo soy bético y en los sueños lejanos siempre se cruza, pero no sabemos".
Con respecto a su temporada a la
Premier, estaba contento con
Laudrup en el banquillo: "Ese año estábamos ocho españoles con
Laudrup. Lo que duró él fue un año muy bonito. Hicimos una gran temporada en
Europa League. Ganamos en
Mestalla, nos eliminó el
Nápoles. Una vez que finalizó
Laudrup a los españoles nos echaron con él. Allí acabó mi aventura, pero si que es una liga donde, por mis cualidades, no me veo, pero nunca se pueden cerrar puertas. Es una
Liga súper bonita, los partidos se viven intensamente. Pero por lo que buscan ahí no se si algún día volveré".
Por último, afirma que ahora mismo no escucha ofertas y se centra en su actual club: "Ahora me reuní con mis agentes, estuvimos hablando. Tengo una deuda pendiente con el
Genk, nos clasificamos para la final. Creo que no era un momento para intentar salir ni forzar nada. Estoy centrado en el
Genk y no quería escuchar ninguna oferta que pudiera distraerme y poner en un aprieto al club".