Contra el Madrid, el Betis de Setién volvió a mostrar el contraste entre su ataque y su defensa. Mientras que el primero se sitúa como el
quinto mejor de La Liga, con 41 tantos, el segundo, con cincuenta goles en contra, ya se sitúa al nivel de
Las Palmas (52) y
Deportivo de la Coruña (53), los cuales ocupan actualmente posiciones de descenso.
Esta situación ha generado que los partidos de los verdiblancos se suelan caracterizar como un intercambio de golpes y un correcalles permanente, muy dados al espectáculo. En la mente de todos se guardan la victoria contra el
Sevilla (3-5), los empate ante la
Real Sociedad (4-4) o el
Girona (2-2), la
derrota frente al Valencia (3-6) y el partido de anoche (3-5).
En la ofensiva, el
Betis está cuajando una excelente temporada en Liga, con solo Barcelona (60 goles), Real Madrid (55), Valencia (47) y Real Sociedad (46) siendo mejores en este apartado.
A nivel histórico del club en el siglo XXI, los verdiblancos dirigidos por
Quique Setién ya superan en goles a favor a cinco campañas ligueras del Betis (2005-2006, 2006-2007, 2013-2014, 2015-2016 y 2016-2017) y miran de reojo, con catorce jornadas por disputar, a los 62 tantos de la 2004-2005 y a los 57 de la 2012/2013, temporadas que concluyeron con clasificación para disputar títulos europeos. Si terminara la liga con la
media de 1,71 goles a favor por partido que maneja actualmente, superaría la marca de dichos años.
Por el contrario, la retaguardia verdiblanca también va camino de superar récords, negativos en este caso. El portero
Antonio Adán está a doce goles de ser el guardameta verdiblanco que más tantos ha encajado en una Liga de Primera, que fue el propio Adán en la 2016-2017 con 62 tantos, como
señala @pedritonumeros.
Teniendo en cuenta solo el siglo XXI, el Betis ya ha encajado más tantos en 24 partidos que en cuatro ligas de 38 jornadas (2001-2002, 2003-2004, 2004-2005 y 2006-2007). De seguir con la
media de 2,08 goles en contra por encuentro que lleva acarreando en el presente curso, superaría los 78 que se recibieron en la campaña 2013-2014, en la que se quedó último de la Primera División.