Se ha hablado mucho de cómo Quique Setién ha cambiado la forma de jugar de los futbolistas que ya pertenecían a la disciplina verdiblanca y de cómo ha traído a futbolistas que encajan con su
filosofía de juego. Sin embargo, uno de los aspectos más destacados es la forma en la que el 'estilo Setién' ha transformado a
Antonio Adán, portero titular del Betis.
Y es que el guardameta, ex del Real Madrid, Cagliari y desde hace cuatro años integrante del club de Heliópolis, se ha convertido en el mayor portero pasador de LaLiga Santander, con 880 asistencias, superando a
Rulli de la Real Sociedad (828) y a
Ter Stegen del Barcelona (673), que son los que le preceden en la clasificación según datos de LaLiga.
Existe además una
cierta paridad entre pases cortos y pases en largos, que mientras en el resto de porteros del campeonato se desequilibra muy en favor de los despejes por alto, en Adán se reparten en 419 y 461 respectivamente, una diferencia solo de 42 entregas. Estos 880 pases de Adán superan ampliamente la media de los porteros de Primera División, que se sitúa en 340. Otro aspecto por el que destaca el cancerbero bético por encima de sus compañeros es en salidas del área, con siete, mientras otros porteros tienen una media de 5,3.
Sin embargo, no todo son buenas noticias para Antonio Adán y es que la
fragilidad defensiva verdiblanca,
demostrada durante toda la temporada, se ha hecho notar en sus números ligueros. Habiendo recibido 45 goles en 23 partidos, encaja una media de 1,95 tantos por encuentros, la
peor de su carrera verdiblanca, superando sus registros en la campaña 2016/17 (1,67), en la 2015/2016 (1,38) e incluso en la temporada del descenso, la 2013/2014, en la que en 17 partidos sufrió 31 goles, con una media de 1,82 tantos por jornada.