Es el único futbolista de la plantilla que lo ha jugado todo con
Víctor Sánchez del Amo, que no sólo ha confiado en él para sus dos encuentros ligueros, sino que también aprovechó su polivalencia para darle en
Copa del Rey la confianza que le habían faltado con Poyet. Así,
Ryan Donk acumula los últimos 270 minutos oficiales del
Betis, que le sirven para adquirir una interesante velocidad de crucero en lo que al ritmo se refiere.
Todavía queda mucho para pensar en su cláusula de compra obligatoria, aunque ya ha subido cuatro de los veinte 'escalones' fijados en el contrato de cesión con el
Galatasaray. De esta forma, si disputa al menos medio tiempo en otros dieciséis encuentros oficiales de aquí a final de temporada, los verdiblancos deberán abonar 1.538.750 euros al cuadro turco. Una cantidad que podría parecer, en principio, excesiva para un futbolista de 30 años, pero no sólo está convenciendo al nuevo entrenador, sino que en la secretaría técnica, en el caso hipotético de tener que tomar una decisión en estos momentos, también se decantarían por atar por otros dos o tres ejercicios más a este poderoso holandés de ascendencia surinamesa.
El caso es que
Donk, que demostró ante el
Deportivo en el torneo del K.O. su versatilidad, soluciona la papeleta en dos de las posiciones claves para reforzar el verano pasado. Tocaba cerciorarse, si bien los primeros exámenes los ha aprobado con nota. Tanto que Víctor ha transmitido a
Torrecilla que, salvo giro mayúsculo de los acontecimientos, dará continuidad a la pareja formada por el neerlandés y
Petros en la parcela ancha.
Por ende, el interés por recuperar a
N'Diaye se ha diluido en las últimas semanas, trasladándose la prioridad inverna a otras zonas del campo. Pese a que, con
Donk, el Betis contaría con hasta cuatro centrales, la idea es seguir jugando con tres, por lo que el millón aproximado de la partida presupuestaria para fichar en enero se destinará posiblemente a un zaguero zurdo.