Queda menos de una semana para el cierre del mercado de traspasos, los Lakers aún tienen deberes por hacer, el equipo está lejos de la clasificación directa a playoffs... Y entre toda esa mezcla de circunstancias que aumentan la presión en el equipo, de pronto aparece LeBron James y comparte en redes sociales un enigmático mensaje con un solo emoticono: un reloj de arena.
Sin hablar, el ganador de cuatro anillos dejó claro que algo no estaba bien. Algunos pensaron que simplemente era un mensaje para la propia franquicia angelina, a la cual pedía traspasos. Otros directamente vieron una petición de traspaso encubierta que podía llevarle quizás a Dallas Mavericks para reunirse con Kyrie Irving y compartir equipo con Luka Doncic. Todo eran suposiciones, al menos hasta que el propio LeBron ha alzado la voz por boca de su representante, Rich Paul, para aclarar tal asunto.
Lo cierto es que son momentos de nerviosismo en toda la NBA. A seis días de la fecha límite de intercambios, fijada para el 8 de febrero a las 21:00 horas en España, son muchos los equipos que desean reforzarse –entre ellos los Lakers– y bastantes más los jugadores que a buen seguro cambiarán de equipo. Con tal contexto, no extraña que El Rey se haya sumado al juego con este mensaje encriptado.
Como decíamos, la estrella de los Lakers no ha querido que la bola se haga más grande y su agente, Rich Paul, ha hecho estas escuetas y clarificadoras declaraciones a ESPN. "LeBron no será traspasado y no hemos pedido el traspaso".
Más allá de este nimio comunicado oficial, James ha optado en los últimos días por hacer suya la ley del silencio. Tras caer contra Atlanta Hawks compartió el mencionado reloj de arena y desde entonces ha evitado hablar directamente con la prensa; si bien ahora lo hace a través de una extensión de sí mismo como es su agente. Mientras espera novedades en cuanto a la plantilla que le acompañará en lo que resta de temporada 2023-24, al menos anoche se llevó la alegría de derrotar a Boston Celtics, si bien él no jugó por una lesión en el tobillo.
Esto es innegable. Aunque quizás no tengan los activos necesarios para hacer un gran movimiento, ello no evita que los Lakers estén llamando a muchos equipos para buscar un refuerzo para su backcourt. En esta línea, sigue sonando mucho la opción de Dejounte Murray, a quien se le ha unido en las últimas horas Marcus Smart. En cuanto al futuro de James en el equipo, debemos recordar que tiene una opción de jugador de 51,4 millones de dólares en su contrato para la próxima temporada, la cual puede ejercer hasta el 29 de junio para ejercer la opción. Además, su hijo Bronny, que juega en la USC, es candidato a entrar en el draft de la NBA, que está previsto para el 26 y 27 de junio. LeBron siempre ha dicho que le gustaría jugar con él.