Alberto Gálvez3 min lecturaEsta semana el mundo del tenis ha vuelto a vibrar con una estampa de hace un lustro. Djokovic y Juan Martín del Potro han disputado un partido de entrenamiento con el objetivo de que el tenista serbio comience a prepararse para el US Open 2024. Y ambos han reflejado la profunda amistad que hay entre ellos. Comenzaron entre bromas y la cita acabó con una íntima confesión del argentino sobre el balcánico.
Fueron muchos los que viéndoles en la pista recordaron las batallas que juntos protagonizaron tanto en el circuito ATP como en los Juegos Olímpicos. Y ellos mismos tampoco pudieron evitar tampoco rememorar aquellos partidos épicos. "¿Tu mayor logro fue ganar una medalla de oro?", le bromeó 'Delpo' a Djokovic, quien le contestó: "Mi mayor éxito fue ganarte en Río de Janeiro 2016".
Posteriormente, 'Nole' reconocía que el argentino fue su gran enemigo olímpico: "Me ganó dos veces en los Juegos Olímpicos, también en Londres. Es cierto, Delpo es mi némesis en ese torneo, es mi asesino".
Mientras, Del Potro confesaba que en París le hizo llorar: "Djokovic me emocionó el día de la final, cuando ganó la medalla de oro. Era la primera vez que lloraba por un partido de tenis. Tengo una relación muy cercana a él, me emocioné muchísimo porque sabía lo mucho que él quería ganar esa medalla de oro. Antes de empezar el torneo, recuerdo que él hizo un vídeo pasando por delante de las medallas, suplicaba ganarla. Ha completado el juego".
Son muchos los que creen que si Novak se hace con su 25º Grand Slam podría colgar la raqueta, mientras otros no ven su final cerca por el hambre que todavía tiene el tenista serbio. En tierras norteamericanas, Djokovic desea defender el título hasta el final y no descarta revalidarlo. Lo hará en Flushing Meadows, con un largo camino por delante en el que podría medirse a nombres como Jan-Lennard Struff, Frances Tiafoe, Alexei Popyrin o Ben Shelton en su primera semana.
Cabe recordar que en Nueva York ha ganado hasta en cuatro ocasiones y el hecho de poder igualar a Roger Federer, quien tiene cinco coronas, es una de sus fuentes de motivación para este torneo. Atrás ha quedado ya su lesión en Roland Garros y su limitado estado físico que le impidió ganar en Wimbledon a Carlos Alcaraz. Tras lo vivido en la cita olímpica parisina, 'Nole' está más fuerte que nunca y con más ganas que nunca de seguir firmando récords en su exitoso palmarés.