José Luis Martí ha enderezado en menos de dos meses la trayectoria del
Sporting de Gijón. Cogió al equipo en una delicada situación, muy cerca del descenso y, aunque sigue ahí abajo en la decimoséptima posición, con su empate de ayer en casa del
Alcorcón ha dejado los puestos peligrosos a diez puntos a falta de nueve jornadas por jugarse.
El ex centrocampista del
Sevilla FC, entre otros, lejos de pensar en el duelo de ayer, que consideró un "tropiezo", ya ha empezado a hacerlo en el partido de la próxima semana, un encuentro que
enfrentará al Sporting ante el Oviedo, que si bien no es un derbi como tal, así se vive en Asturias. Y en él Martí quiere poner en práctica todo lo que aprendió de Joaquín Caparrós en el Sevilla e implicar toda la semana a su equipo para que llegue muy enchufado a ese partido.
"Tenemos que preparar la semana e impregnarnos del derbi en la ciudad. Hay que salir al campo sabiendo que los tres puntos, en un año difícil, se los merecen los jugadores", señaló Martí. Unas palabras que dejan a las claras lo que para él sería el triunfo sobre el equipo carbayón.
"Para mí cada victoria es la hostia y si son los que representan para un club y para la ciudad como estos más. Tenemos que generar ese ambiente y tenemos que enganchar a la gente otra vez. No he tenido la suerte de vivir un Sporting-Oviedo, pero sí un Sevilla-Betis. La ciudad se va a encargar, en el día a día, de vivir y sentir como se disputará un derbi. Vamos a trabajar sin pasarnos de rosca", advirtió.
Martí jugó entre 2003 y 2008 algunos de los derbis sevillanos más intensos que se recuerdan. Entre ellos, los últimos de Caparrós, que ponía a sus hombres revolucionados esa semana, o en el del botellazo a Juande Ramos, en el que disputó los 90 minutos. Sabe lo que se trae entre manos y quiere trasladar su experiencia a este Sporting-Oviedo.
"Los partidos como el que vamos a vivir la próxima semana son para ganarlos, no para otra cosa, y creo que el equipo es capaz de manejar bien la situación de nervios. Tampoco debemos pasarnos de excitación o motivación porque hay que saber la importancia de los tres puntos que necesitamos", aseguró.
El partido de la primera vuelta, jugado en octubre, acabó empate a uno, por lo que de ganar éste el Sporting, aparte de certificar la salvación y fastidiar al eterno rival, que pelea por los 'play off', daría la única alegría del año a una afición gijonesa desencantada con su equipo.
José López3 min lectura