Uno de los muchos jugadores que ya se entrenan a las órdenes de Lopetegui con
un futuro incierto es Alejandro Pozo. El canterano regresa tras una
fructífera cesión en el Mallorca, al menos en el plano personal, y está por ver si el técnico vasco confía de nuevo en él como
relevo de Navas en el lateral derecho, o si en esta ocasión le exige a Monchi un fichaje para apuntalar esa posición.
El verano pasado, el de Huévar se encontraba en una situación similar. Entonces, regresaba de un préstamo de una campaña completa en
el Granada, con el que logró el ascenso a Primera. Y aunque su posición natural siempre ha sido la de extremo,
se optó por reubicarlo en el lateral, viendo en sus cualidades las de un eventual sustituto del incombustible Navas. Sin embargo, a la postre,
Lopetegui sólo le dio ‘bola’ en la Fase de Grupos de la Europa League, marchándose en enero con 10 partidos jugadores, sólo tres de ellos en LaLiga y de manera casi testimonial.
Pero en el
Mallorca, Pozo se asentó en su nueva posición, jugando
20 partidos en los que anotó un gol y repartió tres asistencias. Y ahora, a sus 21 años, regresa con la firme
intención de ganarse un sitio, como ha dejado patente en sus redes sociales tras realizar el primer entrenamiento de esta pretemporada.
“Es momento de darlo todo, de trabajar duro y volver con más ganas que nunca”, ha asegurado el hervense.
Mientras tanto,
desde Granada se insiste en el interés del conjunto nazarí por lograr una nueva cesión del capitán de la sub 21 y días atrás se aseguraba que
las negociaciones entre clubes estaban muy cerca de cristalizar en un acuerdo. Pozo dejó un grato recuerdo en su paso por Los Cármenes en la 18/19 y el técnico granadinista
, Diego Martínez, lo conoce muy bien de su etapa en el Sevilla Atlético. Pero en las últimas horas, según informaba el diario Ideal, la opción de que Pozo vuelva al Granada s
e ha enfriado tras el fichaje del madridista Alberto Soro, aunque éste en principio tendrá ficha del filial.
Aguarda por Carlos Fernández
Mientras tanto, Monchi, al ser cuestionado por su futuro y el de
Carlos Fernández, en la recámara aún del Benfica, en la presentación de Rakitic, se limitó a decir que
“son dos jugadores más de la plantilla”, aunque a nadie escapa que su futuro es incierto. Con el delantero aljarafeño, precisamente,
sueña también un Granada que sabe que deberá tener mucha paciencia para poder contar de nuevo con sus servicios, como ha reconocido su director general, Antonio Monterrubio:
"No lo tenemos sobre la mesa porque sabemos que hay que esperar. Queda un mes largo de mercado y en el caso de que saliera sería más adelante".