La intención de todos los actores implicados es la misma: acabar LaLiga. Pero en esta película el guion lo marca la evolución de
la pandemia del covid-19 y las medidas para la desescalada que el Gobierno vaya dictando. Por eso, aunque la idea es que las competiciones nacionales puedan finalizar en julio, para dar paso en agosto a la
Champions y la Europa League, todo está en el aire y también cabe la posibilidad de que sea imposible disputar las once jornadas que restan.
En este escenario, la Federación ha querido hacer los deberes y planear la hipótesis de qué equipos dispondrían de billete europeo para la próxima campaña en caso de no acabar LaLiga. En dicho caso,
el Sevilla FC conservaría su actual tercera plaza, como pedía Lopetegui, y jugarçia de ese modo la Champions en la 20/21. Y es que el cuadro nervionense, además, es
el equipo que más jornadas ha permanecido entre los cuatro primeros clasificados, al margen de Barcelona y Real Madrid. Pero la decisión adoptada por la comisión delegada, como es lógico, ha encontrado la oposición de los clubes perjudicados, como
el Valencia o el Getafe, y para variar, la de LaLiga, que no ve competente a la RFEF para tomar dicha decisión.
La gran igualdad reinante alimenta el debate generado, pues sólo hay cinco puntos de diferencia entre el tercero, un Sevilla FC que luce 47 unidades en su casillero, y el séptimo, un Valencia que en estos momentos se quedaría fuera de Europa con 42, con 33 puntos aún por disputarse.
En el caso del Getafe, por su parte, su indignación procede del hecho de que está igualado a puntos con el cuarto, la Real Sociedad, tiene el mismo 'average' general (+12) y además ganó en Anoeta (1-2); pero como el choque de la segunda vuelta no se ha disputado, la RFEF entiende que el 'average' particular no cuenta y
desempata en virtud de los goles a favor, que otorgarían una plaza Champions al conjunto donostiarra.En una parecida tesitura a la de los azulones podría haberse encontrado el Sevilla FC de no haber reaccionado en su
último encuentro en el Wanda Metropolitano. Ante un rival directo como el Atlético de Madrid, no faltó la polémica arbitral para que Morata y Joao Félix remontasen el tanto inicial de Luuk de Jong. C
on ese 2-1 momentáneo, los colchoneros eran terceros con 47 puntos, mientras que los de Lopetegui habrían salido perdedores de un triple empate a 46 con Real Sociedad y Getafe,
quedando en ese caso sextos, pues su +9 habría sido inferior al +12 de azulones y 'txuri-urdines'.
Pero al contrario de lo que ha sucedido en multitud de ocasiones en los últimos años en los grandes escenarios de nuestro fútbol, el Sevilla FC sí supo reaccionar en el Wanda. Y fue
Lucas Ocampos, su futbolista más determinante en esta temporada, quien hizo un gol que bien podría valer la Champions. Él mismo fue el encargado de 'inventarse' el penalti, al adelantarse a Trippier en el momento exacto, y el encargado de batir a Oblak desde los once metros, firmando su décimo tanto liguero.
Un gol que, a día de hoy, permite a Lopetegui y los suyos disfrutar de una tercera plaza que podría ser definitiva si no se encuentran las condiciones de seguridad exigidas en materra sanitaria para poder acabar la temporada.