Hoy se cumple un año de que
Monchi regresó al
Sevilla para iniciar una segunda etapa que devolvió la ilisión al sevillismo y suscitó muchas expectativas a tenor del crecimiento espectacular que el club había experimentado con el isleño al frente.
ESTADIO ya ha hecho un repaso de estos 12 meses del director deportivo, en los que su trabajo, más allá de que se planeara un proyecto a medio-largo plazo,
ya ha cristalizado en resultados tangibles.
No en vano, el
Sevilla de Lopetegui, técnico por el que apostó fuerte a pesar de que no gustaba a buena parte del sevillismo, se encuentra
tercero en la clasificación como uno de los principales aspirantes a clasificarse para la
Champions a falta de 11 jornadas para que concluya la competición. Mérito obviamente de una
planificación arriesgada que ha sido muy criticada a lo largo de la temporada pero que, a la postre, está
dando sus frutos.
El director deportivo
remodeló profundamente el plantel, con la llegada de hasta 11 caras nuevas, con un desembolso muy importante en el centro de la zaga para arreglar los problemas que arrastró el curso anterior y una recomposición del ataque, posición que retocó de nuevo en enero. También remozó el centro del campo, especialmente la faceta defensiva, con
fichajes que han mejorado considerablemente esta zona.
Incorporaciones en su mayoría que han tenido
un peso importante en el rendimiento del equipo y que lo han situado en la
parte alta de la clasificación. No en vano,
de los 11 futbolistas que llegaron en el marcado estival, ocho se encuentran entre los 11 jugadores que más ha utilizado hasta la fecha Julen Lopetegui, lo que da una idea del impacto de las decisiones tomadas por Monchi a la hora de elaborar la plantilla.
Sólo tres efectivos que ya estaban en el equipo se han ganado un sitio entre los más habituales a nivel global, tres casos que, por otro lado, eran de esperar, pues se trata de piezas básicas del Sevilla. El primero,
Jesús Navas, el sevillista con más minutos hasta la fecha, con un total de 2.848, pues lo ha disputado prácticamente todo. Su posición no está doblada, y menos tras la marcha en enero de
Pozo al Granada. El tercero con más participación es
Vaclik (2.655’), titular indiscutible y que sólo se ha perdido algunos partidos por una reciente lesión. De los veteranos también se cuela
Banega (2.071’), como el octavo, si bien en la segunda vuelta ha perdido bastante protagonismo.
El resto de futbolistas en el ‘top 11’ llegaron en verano para convertirse en mimbres casi indispensables para Lopetegui. El primero en aparecer con más minutos responde al nombre de
Diego Carlos, una de las revelaciones del campeonato, con 2.705 minutos en total, sólo con
Navas por delante. El cuarto, otro de los mejores fichajes de Monchi y
más decisivo en este Sevilla, un
Lucas Ocampos con 2.429 minutos y máximo realizador sevillista con 12 dianas.
Le sigue
Fernando, que ha perdido un puesto por su ausencia por lesión ante Atlético. El brasileño, con 2.389’, se ha ganado el rol de
intocable por su importantísima contribución en el eje del centro del campo. El sexto con más presencia es
Jordán, de más a menos y de menos a más para jugar un total de 2.164', 29 más que
Luuk de Jong, quizás el futbolista que más controversia ha suscitado pero que siempre ha contado con la
confianza de Lopetegui, a la que respondió con un golazo en el Wanda.
Del noveno a undécimo, son todos
futbolistas nuevos, pues se trata de
Reguilón, con 2.509 minutos,
Koundé, con 1.992’ y
Óliver Torres, con 1.787’. Lógicamente, en esta lista no entran los fichajes de invierno,
En-Nesyri y Suso, pero el gaditano ya acumula 511 minutos y
forma parte del once base de Lopetegui, integrado por la mayoría de los jugadores citados con anterioridad. Reflejo, todo esto, de que, una vez más,
Monchi ha tenido muy buen ojo en el mercado.