LA CRÓNICA

Escobedo 0-5 Sevilla FC: Las obligaciones, mejor con autoridad

Escobedo 0-5 Sevilla FC: Las obligaciones, mejor con autoridad
- Álvaro Palomo
Álvaro PalomoÁlvaro Palomo 6 min lectura
Existen dos maneras de solventar la obligación de superar a un Tercera en el nuevo formato copero. La de cumplir un trámite con lo justo con la consecuente generación de dudas, como ocurrió contra el Bergantiños, o con una versión autoritaria para remarcar la diferencia de categoría. El Sevilla ha elegido hoy la vía más propia de su estatus con una actitud impetuosa, concentración y decisión para que su superioridad cristalizara sobre el césped artificial. Necesitaba ofrecer buenas sensaciones y se lo propuso desde el arranque con una propuesta vertical y dinámica, con mas profundidad que toque y sin dar opciones al Escobedo, un rival muy humilde, sí, pero también lo era el Bergantiños y dejó lugar para la incertidumbre. Cierto que los mimbres influyeron, pues hoy, como ya avisó en la previa, Lopetegui se guardó mucho menos al restar una semana para medirse con el Real Madrid.

Así las cosas, hasta cinco futbolistas habitualmente titulares utilizó Lopetegui de partida, con la presencia de Jesús Navas en la derecha y Reguilón en la zurda, Jordán en el centro del campo, Ocampos en el costado diestro y De Jong en punta. Sorprendió que el técnico no apostara por Chicharito, sin protagonismo en Liga, en favor del holandés, mientras que en la zurda reapareció Nolito una vez superada su lesión.

Con Fernando en Sevilla y Gudelj como central junto a Sergi Gómez, la medular la completó con Óliver Torres y Mudo Vázquez, con capacidad para gestionar el balón en las reducidas dimensiones del Eusebio Arce ante un Escobedo lógicamente replegado en sus dominios. Lopetegui buscaba asociación para hallar fisuras en el muro del conjunto cántabro. Las halló Nolito en dos ocasiones en el primer cuarto de hora, con un pase filtrado a De Jong, que disparó fuera, y una pared con Reguilón malograda por el meta Rafa.

En un partido accidentado en el arranque, el Sevilla iniciaba por dentro para luego abrir y percutir por las bandas, por donde menoscabó la resistencia local, con la sociedad Navas-Ocampos rompiendo por la derecha. Por ahí arrancó la jugada del 0-1, con una penetración del palaciego que finalizó en un remate de De Jong tras pasar el esférico por Nolito y Franco Vázquez.

Los nervionenses salieron dispuestos a resolver por la vía rápida, con concentración y verticalidad en la conducción. Mudo encontró su sitio y filtró pases como el que aprovechó Navas para dejar solo a Ocampos, impreciso en un remate a placer. El propio Franco Vázquez la tuvo con un lanzamiento desde la frontal después de otra cabalgada de Navas, una pesadilla para el humilde rival.

El absoluto control hispalense sí se tradujo ayer en sucesión de ocasiones, como la de Nolito en una acción de estrategia que se estrelló en el larguero o los cabezazos de De Jong, sin dirección ni potencia, y Mudo, arriba libre de marca. Tanta insistencia permitió al Sevilla llegar al descanso con la tranquilidad del 0-2, merced a otra acción de Navas y la atención de Nolito para aprovechar el error en el rechace de Rafa. Pudo ser mayor la renta de no ser por el portero local, si bien se alcanzó el ecuador con los deberes hechos y una imagen muy positiva.

Varió poco la tónica en la segunda parte, si bien el Escobedo se atrevió una pizca más en ataque y dispuso de varias acciones para marcar, con disparos de Tirado y Pepe. Sus espacios a la espalda los rentabilizó el Sevilla para salir rápido y avisar de que en ningún caso se había salido del partido. Los nervionenses mantuvieron la tensión y el objetivo de aumentar la ventaja, de nuevo con proyección por banda y engrandeciendo todo lo posible un reducido terreno de juego. Navas tuvo el tercero en una contra, pero fue Ocampos, con un cabezazo bombeado, el que acertó tras una excelente acción de un motivado Nolito.

Ni con 0-3 se relajó el Sevilla, impulsado por su hegemonía en todos los aspectos y por la intención de no dejarse nada, propiciando que las oportunidades cayeran en cascada, con remates al larguero de De Jong y Mudo, que no falló a la salida de una falta para aumentar una goleada que cerraría Óliver Torres en la prolongación al finalizar con un tiro cruzado la enésima internada de Jesús, un martillo pilón en su carril.

También tuvieron minutos Rony Lopes, Bryan Gil y Chicharito en una eliminatoria resuelta con una interpretación a la altura del caché sevillista y que deja en la afición nervionense el regusto del dulce trago copero.