Amén de la delantera, donde los focos se centran en
la escasa producción ofensiva de sus ocupantes,
el extremo izquierdo se ha convertido en
uno de los puntos negros en la última planificación de Monchi.
El director deportivo sevillista no pudo convencer al PSV Eindhoven para que rebajase sus pretensiones por
Steven Bergwijn, el gran deseado para reforzar ese puesto, y aprovechó las negociaciones con el Mónaco para el traspaso de Ben Yedder para hacerse con
Rony Lopes, cuyo fichaje se cifró en
25 millones, el más caro de la historia del club.
Pero
el portugués no convence. Monchi defiende su valía, pero Lopetegui apenas le da minutos y, cuando le ha concedido la oportunidad, especialmente en la Europa League, el luso tampoco se ha reivindicado con la fuerza necesaria.
Por ello, no es descabellado que pueda llegar un nuevo futbolista para esa posición en el mercado invernal,
surgiendo días atrás el nombre del joven Mounir Chouiar, que a sus 20 años está brillando en su primera temporada en la Ligue 1 con el Dijon, con el que suma 2 goles en 14 citas.
Fue el diario
L'Equipe el que desveló el seguimiento sevillista, así como el
del Celta, pero ahora ha sido el presidente del club galo,
Olivier Delcourt, el que ha querido poner freno a estas informaciones. "
No hemos recibido ninguna oferta (se hablaba de 10 millones de euros)
y no es transferible este invierno. Para nosotros fue una gran inversión su llegada", declaró, refiriéndose así a los
3,5 kilos que pagó por él al Lens el pasado verano.
Sin duda, el Dijon sabe que tiene
un diamante en bruto y quiere mantener una postura de fuerza. Monchi está atento.