El mercado de enero está a la vuelta de la esquina y pese a que en un principio la intención en la planta noble del
Ramón Sánchez-Pizjuán era la de no tener que acudir al mismo, aunque parece que finalmente no será así. La falta de gol en los
delanteros nervionenses ha obligado a
Monchi a activar el radar en busca de refuerzos de cara a la segunda parte de la temporada.
Sin embargo, puede no ser la única zona a reforzar en el mercado invernal, ya que otra de las posiciones en la que puede haber novedades es la del
extremo izquierdo. Con
Nolito como asiduo en dicha posición hasta su lesión, Lopetegui ha ido probando a diferentes jugadores en esa banda. Desde
Óliver Torres,
Dabbur o
Munir sin ser ninguno de ellos un extremo puro.
Bryan Gil es la otra opción, pero el canterano,
que ha renovado su contrato recientemente, podría salir en busca de una cesión para no cortar su proyección.
Así pues, la última probatura fue en el estadio de Son Moix, donde Lopetegui recuperaba a
Lucas Ocampos y lo puso en banda izquierda por primera vez esta temporada, su posición habitual en el Olympique de Marsella pero no en
Sevilla, donde siempre había jugado en banda derecha.
De esta forma y a las puertas del mercado invernal, desde
Francia no ha tardado en salir el interés del Sevilla en un extremo zurdo que está llamando y mucho la atención en este comienzo de temporada. Según el diario
L'Équipe, Monchi habría puesto sus ojos en el joven
Mounir Chouiar, de 20 años, que milita en el
Dijon.
A nadie se le escapa que el fútbol francés es uno de los caladeros favoritos de
Monchi, pero no solo el Sevilla anda tras los pasos de
Chouiar, pues según esta misma información el
Celta de
Vigo también está atento a sus evoluciones.
Chouiar llegó al
Dijon el último día de mercado a cambio de
3,5 millones de euros procedente del
Lens, donde ya había jugado cuatro partidos firmando dos goles y una asistencia, pero su rendimiento en la Ligue 1 no ha bajado, anotando dos goles. Sin embargo, parece que el
Dijon no está por la labor de vender al jugador pues es imprescindible en el juego del equipo del este de
Francia.