El empate (1-1) que el
Sevilla sacó de
Mestalla, además de la decepción que dejó después de llegar el tanto del Valencia en la fase final del encuentro, aumentó los problemas que
Julen Lopetegui tiene para montar el sistema defensivo, y más cuando mañana visita el
Sánchez-Pizjuán el
Atlético de
Madrid, en la duodécima jornada de
LaLiga.
A la cita de
Valencia acudió el conjunto hispalense con la baja por lesión de dos de sus cuatro centrales,
Daniel Carriço y
Sergi Gómez, pero antes del partido ante el conjunto che, uno de los descartes del técnico guipuzcoano fue el lateral zurdo
Sergio Reguilón, quien no fue inscrito al tener algunas dolencias musculares.
Al madrileño le suplió
Sergio Escudero, pero éste no aguantó sobre el césped ni media hora, ya que un fuerte encontronazo con su compañero
Diego Carlos le obligó a abandonar el terreno conmocionado, en camilla y con un collarín, además de a ser trasladado a un hospital. Sufrió un traumatismo craneoencefálico que le hace ser seria duda para este sábado.
Los problemas por lesión se complican aún más ante la baja segura por sanción de
Fernando Reges, quien vio una tarjeta amarilla con la que cumplirá ciclo. El brasileño es un fijo en las alineaciones titulares de
Lopetegui y una de las gratas sorpresas por su gran rendimiento en el centro del campo tanto por su derroche físico como por calidad técnica.
Aunque va a ser difícil sustituirle, el principal inconveniente no es ese, sino que lo hará
Nemanja Gudelj, quien fue central de urgencia el pasado miércoles en la capital del Turia con
Koundé de improvisado lateral. Es decir, salvo sorpresa de última hora, todo apunta a que
Lopetegui deberá tirar del filial, pues está con lo puesto atrás (Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos y Reguilón, más Pozo) para recibir al espartano Atlético del Cholo.