"No es seguro, pero es posible". La frase proviene del entorno más cercano a
Éver Banega y se refiere a la opción de que el futbolista del
Sevilla acabe recalando en
Boca Juniors. La información publicada por
Olé añade que los clubes conversan para hacer factible una operación que financieramente exigirá mucho al conjunto bonaerense.
A
Banega le resta un año de contrato con el
Sevilla y tiene una cláusula de rescisión de 20 millones. La conversaciones para una renovación en
Nervión están en punto muerto y el rosarino coquetea sin reparos con su exequipo, al que le apetece volver, ya sea ahora o más adelante.
No es el único devaneo de
Banega, que también maneja propuestas del fútbol turco, con el
Galatasaray como el más interesado. Las cifras que manejan los dos equipos están en el entorno de los ocho millones de euros para el traspaso. En cuanto a la ficha para el futbolista, el equipo otomano tiene mucho más que ofrecer que
Boca Juniors.Cabe recordar las buenas relaciones que existen entre el presidente de
Boca, Angelici, y el del Sevilla, José Castro, algo que podría favorecer un entendimiento, aunque el presidente nervionense siempre pondrá el interés del club por delante de cualquier amistad y el precio de una hipotética salida lo acabará dictando el mercado.
Monchi anda centrado en la operación salida, pero podría darse la circunstancia de acabaran saliendo los tres futbolistas más importantes del pasado curso sin que la voluntad del de
San Fernando sea esa.
En cualquier caso, e independientemente de lo que ocurra con
Banega, el gaditano realizará varios refuerzos en la línea medular y ya tiene avanzadas las contrataciones de
Benjamin Bourigeaud y de Joan Jordán.