Guido Pizarro estuvo muy cerca de materializar ayer su traspaso a Tigres. El jugador puso de su parte y presionó lo que pudo para que su vuelta al equipo mexicano se hiciera efectiva, pero al final faltó el acuerdo definitivo entre clubes.
Fuentes consultadas por ESTADIO aseguran que el acuerdo estaba cerrado y que el Sevilla se echó para atrás por las formas de pago. El director deportivo del Sevilla había acordado con Miguel Garza, su homólogo en Tigres, la cantidad del traspaso -cercana a lo que desembolsó por él el Sevilla en verano-, pero Tigres quería satisfacerlas a plazos y el Sevilla lo exigió al contado.
Igualmente, desde México informan que hubo un cambio de última hora del Sevilla en este aspecto. Pudo venir motivado por el hecho de que Brozovic al final no pudo llegar a Nervión, por lo que el club hispalense ya no necesitaba desprenderse de un futbolista que en opinión de Arias y de Montella aún puede ser útil.
Álvaro Palomo1 min lectura