La expedición del
Sevilla ha tenido un viaje de vuelta más largo de lo esperado desde
Londres, donde ayer acabó su participación en la Emirates Cup tras vencer a Leipzig y Arsenal.
Y es que el avión sevillista ha aterrizado en suelo hispalense cuatro horas más tarde de los previsto, a eso de las 6:45 horas de la mañana. Según informa la web de la entidad nervionense, el vuelo partió de
Londres con 45 minutos de retraso pero con margen suficiente (la hora estimada de llegada era a las 2:45 horas) para poder aterrizar en
Sevilla antes de las 3:00 horas de cierre del
aeropuerto de San Pablo.
Sin embargo, el avión se encontró con mucho viento de frente durante el trayecto y no pudo llegar a tiempo al aeropuerto hispalense, por dos minutos. El aterrizaje se retrasó a las 3:02 pero a cinco minutos para las tres de la mañana, la torre de control comunicaba a la nave sevillista que el aeropuerto cerraba ya que los bomberos del aeródromo se negaban a esperar esos dos minutos para prestar sus servicios.
De esta forma, el avión tuvo que cambiar el rumbo y desviarse a
Málaga, donde aterrizó sobre las 3:30 horas de la mañana y en el mismo avión tuvo que esperar la plantilla sevillista para volver a
Sevilla a partir de las 6 de la mañana para llegar a Sevilla poco después de las 6:30 cuando el aeropuerto sevillano vuelve a su funcionamiento.
De este modo, la expedición del
Sevilla ha tenido que realizar un viaje más largo y agotador de lo esperado. Berizzo ha dado hoy el día libre a sus jugadores, que volverán al trabajo este martes a partir de las 19:30 horas, en la ciudad deportiva, a puerta cerrada.