Nervión estrenará esta noche la confrontación de dos estilos contrapuestos, de filosofías prácticamente contradictorias y que en el campo se complementarán en cierto modo, pues no hará falta que el balón eche a rodar para saber cuál será la tónica del encuentro.
Sampaoli quiere siempre la pelota, instalarse en el campo del rival, y
Ranieri cede la iniciativa y basa su propuesta en arroparse atrás a la espera de salidas rápidas o balonazos largos en busca de la movilidad de su puntas. No en vano, el
Leicester es el equipo de octavos que menos posesión ha registrado en la fase de grupo, con un 41,6 por ciento, muy alejado de los guarismos nervionenses en este apartado a pesar de que en
Champions su control ha sido inferior que en
Liga.
Y es que en la competición continental el
Sevilla ha mostrado una cara diferente a la doméstica, como demuestra que ha firmado, junto al
Leicester, las peores cifras realizadoras entre los equipos que han pasado de ronda. Sin embargo, los pupilos de
Jorge Sampaoli pueden presumir de ser el equipo que más veces ha dejado su portería a cero en la fase de grupos de la
Champions League, con un total de cinco en seis partidos.