Semana de mucho trabajo para los equipos que todavía siguen con vida en la competición del KO. El
Almería es uno de ellos y el esfuerzo será doble, debido al gran número de bajas que ha arrastrado hasta esta semana por lesiones, sanciones, llamadas de la selección nacional y por contagios de COVID-19.
Ha sido este martes cuando
Rubi ha podido disfrutar de cierta normalidad en los entrenamientos tras recuperar a jugadores como
Makaridze, Juan Villar, Curro y Samú después de haber superado su contagio por coronavirus. Además
Dyego Sousa también vuelve a estar disponible para el técnico catalán al que hoy hemos visto bastante más relajado que en su rueda de prensa posterior a la derrota frente al
Cartagena.
En esa situación
Rubi rajó contra LaLiga y aseguró que ''ya habían conseguido lo que querían, darle emoción a la liga'' y dejó entrever que si era necesario cometería alineación indebida para dar descanso a los jugadores que venían en peores condiciones físicas, pensando en el partido contra Las Palmas del domingo.
La realidad en la sala de prensa del Estadio de los Juegos Mediterráneos ha sido hoy bien distinta. Hoy el técnico de Vilasar de Mar ha reconocido su error y ha precisado que estas dos declaraciones fueron ''
una pataleta'' ocasionadas por el enfado tras la negativa de LaLiga a suspender el partido,
justo al contrario de lo que le sucedió al Lugo cuando se iba a medir precisamente al equipo indálico.
La planificación del partido sigue estando marcada por la
inactividad de los contagiados por el coronavirus y es por eso que Rubi ha dicho que hará ''
un balance de minutaje'' para preparar los dos encuentros de la semana de la mejor manera posible. Eso no significa que el entrenador del Almería tire la Copa, ya que ha asegurado que ''lo van a dar todo para intentar pasar'' y
ha pedido el apoyo de la afición rojiblanca para alentar a su equipo el jueves a las 20:00 en el Mediterráneo. Eso sí, ha reconocido que ''es la liga y todo el año lo va a ser'' pero le resta importancia a las rotaciones gracias a los cinco cambios y a que varios jugadores podrán jugar los tres partidos de la semana que se inició el domingo pasado.
Aunque pueda parecer lo contrario debido a todo el revuelo formado tras el partido contra el Cartagena, Rubi asegura que ''se ha cerrado la puerta a todo este tema y no van a buscar situaciones externas extrañas'' pero sí que los futbolistas se muestran ''
con rabia y con ganas de que nos vuelvan a ver''
Atendiendo a lo puramente futbolístico, el técnico catalán ha prestado atención a la organización de todo el bloque porque ''un error en Segunda lo puedes pagar caro, pero contra un Primera lo pagas seguro''
Respecto al temido bajón que podría comenzar con esta derrota frente al Cartagena y que ha encendido las alertas en Almería debido a los antecedentes de otras temporadas, Rubi ha mostrado tranquilidad asegurando que ''los futbolistas no van a bajar, están con unas ganas locas'' y ha recordado que el equipo tiene
una ventaja de puntos considerable, con un partido menos, gracias a los buenos resultados cosechados en la primera vuelta