El precioso detalle del Huesca con Cádiz y el Cádiz CF

El precioso detalle del Huesca con Cádiz y el Cádiz CF
- M. H.
Óscar MurilloÓscar Murillo 3 min lectura
Por segunda temporada consecutiva, los partidos a domicilio del Huesca llevan aparejados la fabricación de un brazalete de capitán conmemorativo y único para la ocasión que pretende homenajear al rival, a su afición y a la ciudad que acoge a los azulgranas. Y, para la visita de este sábado (18:30 horas) al Cádiz CF, correspondiente a la jornada 35ª de Primera división y con ambos equipos buscando certificar cuanto antes la permanencia, la institución altoaragonesa ha bordado (literalmente) un diseño que se ha convertido en viral y que ha hecho las delicias de todos los que sienten en amarillo.

La propia cuenta del Huesca en las redes sociales interpelaba a su homóloga cadista sobre si daban su aprobación a la prenda, contestando desde la 'Tacita de Plata' con un "precioso brazalete" y un emoticono con corazones en los ojos. Decenas de aficionados del conjunto andaluz se sumaban a la felicitación por lo acertado de la elección. Según explicaban desde El Alcoraz, la trama del diseño del brazalete está formada por la icónica sonrisa de Michael Robinson, acompañado de estrellas de ocho puntas, que hacen referencia a la tradición marítima de la ciudad de Cádiz y, en concreto, a la rosa de los vientos ubicada en el mirador con una vista 360º de la Torre Tavira. Además, esta edificación posee en su interior la primera cámara oscura que se instaló en España, la cual permite disfrutar de unas vistas diferentes de la ciudad, reflejadas en tiempo real a través de un sistema de lentes. Por último, los colores del brazalete hacen una obvia alusión a los que identifican al club gaditano.

Insisten en el Huesca en que Robinson, de cuya muerte se acaba de cumplir un año, estuvo plenamente identificado con la escuadra del Ramón de Carranza. "Eterno era también su amor por el Cádiz CF, club del que se declaró seguidor poco tiempo después de retirarse como futbolista. Llegó a ser consejero delegado de la entidad, sufriendo como un cadista más en Segunda B, pero también disfrutando de los ascensos, como el histórico conseguido en Chapín en 2005, para devolver al Cádiz a la máxima categoría del fútbol nacional después de 11 temporadas. Una verdadera lástima que no pudiera estar presente para ver de nuevo a su Cádiz en LaLiga".