Madrid, 19 abr (EFE).- El 18 de diciembre de 2021, hace cuatro meses, el Rayo celebró su último triunfo liguero. Desde entonces trece partidos sin ganar, un registro que iguala el mismo número de encuentros que estuvo sin vencer en Primera en 2003, cuando acabó descendiendo a Segunda, y que supone la peor racha de su historia.
En lo que va de año, el Rayo Vallecano lleva trece partidos disputados y no ha ganado ningún encuentro, siendo todo su balance nueve derrotas y cuatro empates, que se resumen en solo cuatro puntos de 42 posibles.
El equipo madrileño llegó al final de la primera vuelta quinto clasificado con 30 puntos, a quince del descenso, y llegados a la jornada 32 es decimotercero con 34, reduciendo esa diferencia con la zona de peligro a solo cinco.
En este periodo en lo que va de 2022 ha empatado con el Betis (1-1), Sevilla (1-1), Granada (2-2) y Valencia (1-1), pero ha perdido con el Atlético de Madrid (2-0), Athletic (0-1), Celta de Vigo (2-0), Osasuna (0-3), Elche (2-1), Real Madrid (0-1), Cádiz (2-0), Atlético (0-1) y Alavés (1-0).
La caída libre del Rayo se justifica, en parte, en la falta de pegada del equipo, con solo seis goles en los últimos trece partidos y un total de 32 en todo el campeonato, siendo el quinto conjunto de la categoría que menos marca.
Además, su rendimiento a domicilio está siendo muy flojo, con solo seis puntos sumados de 45 en juego. El único equipo que iguala ese registro es el Alavés, colista de Primera.