Descenso. Esta es la palabra más utilizada entre los aficionados malaguistas durante las últimas semanas. También dentro del club blanquiazul, incluso entre los integrantes de la plantilla. La situación y la diferencia con los equipos de la zona baja se han reducido considerablemente en cuestión de un mes. Con la tensión propia de quien se asoma al abismo,
Alberto Escassi reconoció la preocupación del vestuario sobre la negativa racha que atraviesan. "El equipo está con ese
nerviosismo. Esta liga es muy complicada, y te metes en esa dinámica y es complicado salir de ahí. No se nos ronda por la cabeza estar en una situación peor. No me gusta ni decir la palabra. Ese pensamiento es imposible. Pasa por ganar como sea este lunes, más allá de jugar mejor o peor", decía el capitán en la comparecencia ante los medios de comunicación previa al encuentro frente al Cartagena.
Con la imperiosa necesidad de vencer cuanto antes, el paleño reveló la importancia de este próximo partido: "Esta semana es clave. La realidad es que ya estamos mirando los resultados que los de abajo están haciendo. No hay que dejar pasar más partidos.
El Málaga es el Málaga. Los rivales directos tienen esta semana partidos complicados, pero tenemos que depender de nosotros mismos. Después del Cartagena quedan 13 jornadas más. No me gusta decir que es una final, pero es muy importante".
La llegada de
Natxo González ha traído cambios en el equipo. Para el veterano jugador, hasta el momento, es positiva su
llegada al banquillo: "Tenemos mejoría. En Miranda el partido no lo cuento porque Natxo no tuvo tiempo de trabajo. En Zaragoza con el empate se vio otra cosa. Aquí en Almería perdimos, pero desde mi punto de vista el equipo dio muy buena imagen.
Es la debilidad en las áreas. El primer tiro que hacen es su gol. Tenemos que tener más responsabilidad, pero creo que hemos mejorado. El equipo ha estado mucho más ordenado tácticamente y se ha visto muy compacto".
"Se ven brotes verdes. La realidad es la que es. Nos hemos metido en una situación delicada nosotros mismos. Que nadie dude de nosotros. Somos los primeros que queremos ganar, pero desgraciadamente no nos salen las cosas. Está clarísimo que estamos en una dinámica muy negativa en la que ninguno queríamos estar. Desde la unión que tenemos seguro que lo sacamos adelante. No hay que dejarlo pasar porque estamos en una situación en la que el Málaga no se merece estar", apuntillaba en la misma línea que la respuesta anterior.
Escassi, como uno de los capitanes del equipo, tuvo que lidiar y calmar a la afición en la llegada del Málaga CF a La Rosaleda después de la derrota contra el
Sanse. Comprensible con el generalizado enfado de la hinchada, incluso reconoció que a veces es bueno un toque de atención para los propios jugadores. "Creo que todo el mundo, cuando firma por el Málaga, sabe la presión que hay y el gran club al que venimos. No sé si fue necesario, pero tienen todo el derecho. Desde dentro del vestuario entendemos el enfado de la afición. No queremos ver al Málaga en la posición que está en la tabla.
Salimos los capitanes a hablar con ellos. De vez en cuando es bueno que nos den un tirón de orejas. Nos dijeron que en el siguiente partido iban a estar a muerte y animando al equipo. Es lo que nos va a ayudar a salir adelante. Lo entiendo, y
agradezco el respeto y diálogo que hubo", decía el centrocampista.
Por último, lanzó un mensaje directo a la afición para aunar fuerzas entorno al encuentro ante el Cartagena: "Dos palabras:
creer y unión. Que crean en nosotros. Somos los primeros que entendemos el enfado que tienen. Soy de Málaga y los primeros que me aprietan son mis familiares y amigos. No se merecen esta situación por la que estamos pasando. Que no dejen de creer en nosotros.
Quedan 14 partidos, 42 puntos. Con esas dos cosas seguro que sacamos esto adelante".