El mercado de fichajes de invierno del
Granada CF fue muy movido. Trabajando a destajo,
Pep Boada logró los fichajes de Collado, Petrovic, Uzuni, Arezo y Raba. Este último, fuera de mercado, ya que se incorporó en condición de agente libre.
Raba había participado únicamente en siete partidos de liga con el Villarreal sin disfrutar de ninguna titularidad, aunque en Copa del Rey si partió de inicio en los tres compromisos disputados por el equipo valenciano. El extremo diestro tuvo que salir del submarino amarillo para posibilitar la llegada de
Lo Celso.
Con el mercado nacional ya cerrado, el club granadino se hizo con los servicios de
Dani Raba, cuyo contrato con el Villarreal quedó rescindido en una frenética última jornada de mercado. El futbolista cántabro llegaba así en calidad de jugador libre para aportar más competencia en la zona de ataque.
El atacante zurdo aterrizaba en Los Cármenes en busca de una estabilidad que no ha podido conseguir de la mano de Unai Emery en el cuadro amarillo, y se comprometió con el club del Zaidín hasta final de temporada.
El jugador de 26 años no goza de regularidad desde la campaña 2019-20. En aquel curso disputó 23 choques en las filas del Huesca con 20 titularidades, cuatro goles anotados y una asistencia repartida. Todo hacía pensar que el fichaje de Raba significaba más leña para el arsenal de
Robert Moreno, que ha aumentado considerablemente en este mercado invernal. Todos los futbolistas incorporados, a excepción de Petrovic, tienen una clara vocación ofensiva.
Pues bien, fue salir a debutar ante el
Real Madrid en el Santiago Bernabéu y la lió. El Granada estaba aguantando estoicamente los arreones blancos e incluso llegó a inquietar la meta defendida por Thibaut Courtois en alguna que otra ocasión.
En el minuto 70 entro Raba y cinco después, perdió la pelota de la manera más tonta que hay para regalarle a la zurda de Asensio una ocasión que este no desperdició y anotó el tanto de la victoria para los de Chamartín.
Parece que tras ello, Raba fue sometido a una especie de castigo, aunque las lesiones le han lastrado de igual manera en toda su estancia como futbolista del Granada. No obstante, volvió a tener minutos con Karanka en el Wanda Metropolitano ante el
Atlético de Madrid y estuvo a punto de ocurrir lo de meses antes, aunque esta vez, los rojiblancos puntuaron en esa plaza.
Ahora, tras no prolongar como es evidente su contrato como nazarí, el Leganés anda detrás de él, según informa Cazurreando. Veremos si finalmente se da y Raba puede encontrar esa regularidad que ha perdido.