El partido debió haber comenzado a las 13:00 horas en Valdebebas y, de hecho, los equipos titulares de ambas formaciones estaban anunciados. Sin embargo, minutos antes del inicio del partido la federación española comunicó su aplazamiento.
El Juez de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) recibió este mismo sábado la petición por parte del club riojano que, mediante un certificado de la responsable médico del equipo, informó de que el jefe de prensa del equipo es contacto estrecho de un positivo en COVID-19.
Un rastreador de La Rioja se lo comunicó a las 21:30 del viernes y se confinó en su habitación individual del hotel del equipo. Previamente, sin embargo, había viajado con toda la expedición desde Logroño a Madrid en autobús.
"Del citado certificado se desprende que, a pesar de que se haya realizado una prueba PCR al considerado contacto estrecho, no se puede garantizar que éste haya podido contagiar a los miembros de la expedición que ha viajado a Madrid", recoge la comunicación del EDF Logroño al Juez de Competición.
El club riojano prefirió "no ser partícipe en un posible contagio masivo a las jugadoras y trabajadores del equipo rival", por lo que solicitó el aplazamiento de su partido ante el Real Madrid.
Alberto Peláez, Juez de Competición de la RFEF, aceptó su petición de aplazar el partido, correspondiente a la jornada 16 de la Primera Iberdrola.