Está siendo una temporada de altibajos para el Sevilla FC Femenino. En décimo primera posición con catorce puntos, ha demostrado que es capaz de lo mejor y de lo peor en estas dieciséis jornadas de campeonato disputadas. La irregularidad de este equipo hace que no termine de despegar en la Primera Iberdrola.
Comenzaron la temporada a velocidad de crucero ganando por cuatro a cero a un conjunto que si por algo se ha caracterizado desde su ascenso a Primera División en 2015 ha sido por su solidez, el Granadilla. Todo hacía indicar que esta podía ser la campaña de la consolidación pero tras aquella abultada victoria, encadenaron cuatro derrotas consecutivas en las que no consiguieron ver puerta.
De nuevo, y otra vez en casa, cortaron aquella mala racha de resultados con otra goleada, esta vez ante el colista, el Espanyol, y por el mismo resultado que en la primera jornada (4-0). Los dos compromisos posteriores terminaron en derrota (Levante y Real Sociedad) para luego reencontrarse con los tres puntos ante el Valencia (4-3) en el Jesús Navas y en esta línea continúa el equipo en este curso. En donde exhibe músculo en casa y se desinfla fuera.
El gran talón de Aquiles esta siendo la falta de continuidad en los resultados en donde solo han logrado encadenar tres partidos sin perder (victoria ante Madrid CFF y empates ante Athletic y Rayo). A todo ello les sigue desde los últimos partidos, carencias a la hora de generar ocasiones de peligro y segundas partes para olvidar. A principios de temporada, el equipo creaba pero no atinaba y ahora ni genera ni marca.
Sin embargo, lo cierto es que las de Cristian Toro han demostrado que puede competirle a cualquier equipo. Su gran partido contra el líder, el FC Barcelona, en el Jesús Navas junto a las goleadas ante Granadilla o Espanyol y el empate frente al Athletic Club en Lezama, dan buena prueba de ello. Pero por otro lado, hay partidos en los que la imagen mostrada por las sevillistas es bastante pobre (Tacón, Sporting de Huelva, el segundo acto contra el Rayo Vallecano, Granadilla o la primera parte ante la Real Sociedad). A lo que se suman errores individuales puntuales que le cuestan caro a las hispalenses como los penaltis cometidos durante la temporada (cinco en total).
La inversión realizada esta temporada en la sección femenina y las instalaciones de las que gozan provocan que se les exija más de lo que están demostrando hasta ahora. El no haber ganado un partido fuera de casa desde el 24 de febrero de 2019 y solo haber sumado una unidad a domicilio en la 2019/20 hasta el momento, mina las posibilidades de escalar posiciones de un una escuadra que debe aspirar a más.
Alejandro Pecci4 min lectura