Fran Escribá considera que el del Celta de Vigo, con el que ha firmado hasta final de temporada tras la destitución anoche del portugués Miguel Cardoso, es el proyecto "ideal" para él, por eso no tardó "nada" en aceptar la oferta que le trasladó el director deportivo, Felipe Miñambres.
"Siempre me gustó este club y vengo con mucha ilusión, aunque la situación, evidentemente, es difícil. He tenido jugadores que han estado aquí y todos me han hablado bien del club. Me gusta la plantilla, el club y creo que es un proyecto ideal para mí", afirmó el técnico valenciano durante la rueda de prensa.
Arropado por el presidente, Carlos Mouriño, y Felipe Miñambres, Escribá desveló que esta temporada rechazó otras ofertas porque no las consideraba atractivas para él, pese a llevar más de un año sin entrenar -fue destituido del Villarreal en septiembre de 2017-.
"Tuve opciones de estar en otros sitios, pero las rechacé. Siempre dije que prefería esperar a un proyecto que me gustara y por eso tardé tanto en coger uno", aclaró.
"Estar trabajando todos los días, con la tensión e incertidumbre que conlleva, te hace perder perspectiva. Primero descansé y una vez que pasó esa época ha sido una formación continua. He estado viendo mucho fútbol, no solo en España. También aproveché para hacer cambios en el equipo técnico. He intentado arreglar aquellas cosas que pensaba que debía mejorar", añadió.
Escribá reconoció que uno de sus retos será reducir la cantidad de goles que encaja el Celta, aunque para él no es la causa de la dinámica negativa en la que entrado tras ganar únicamente uno de sus últimos once partidos de LaLiga.
"Cualquiera diría, cuando un equipo ha encajado tantos goles, que el problema es defensivo, pero yo creo que no es defensivo sino de equilibrio. Es un aspecto que siempre me ha preocupado en mis equipos e intentaremos mejorarlo", ahondó el nuevo entrenador celeste, a quien el equipo le transmite "buenas sensaciones" porque "en todos los partidos que he visto me ha llamado la atención que nunca haya bajado los brazos".
Con pasado en el Elche, Getafe y Villarreal en la máxima categoría, Escriba se estrenará en el banquillo de Balaídos el próximo domingo ante el Betis. Mañana dirigirá su primer entrenamiento en las instalaciones deportivas de A Madroa, donde contará con el apoyo de los exfutbolistas del Celta Borja Oubiña y Mario Bermejo.
"La idea es que estén para aquello que necesitemos. Habrá días que estarán en el campo con nosotros y otros días necesitaremos otro tipo de ayuda. Como Felipe me dijo, son gente del club, que lo quieren mucho, y estarán para lo que necesitemos. Bastantes veces nos encontraremos en el campo", indicó.
No se mostró especialmente preocupado por la recuperación del internacional español Iago Aspas, quien se encuentra en la última fase de recuperación de la rotura fibrilar que sufrió en el gemelo de su pierna derecha y ya podría tener algunos minutos ante el Betis.
"Todos sabemos que es un futbolista importante, pero hay que hacer valer a los que están disponibles. Hay jugadores con nivel y calidad de sobra para que no tengamos que estar echando de menos tanto a los que no están", concluyó Escribá quien avanzó que su "sistema madre" es el 4-4-4-2 pero en su aventura en Vigo podría utilizar otro.