Después del Mundial de Rusia, en el que Pizzi llegó a ser criticado por su errático inicio (perdió 5-0 ante los organizadores) y después ratificado tras ganar a Egipto 2-1, tenía que demostrar en su primer envite de la copa asiática que su federación no se había equivocado.
Y no pudo ser mejor el estreno de Arabia Saudí, con una victoria incontestable ante un rival inferior que en ningún momento tuvo opciones de conseguir los tres puntos. Desde el primer momento, los hombres de Pizzi pasaron la apisonadora hasta ganar 4-0 para encabezar el grupo E.
Hattan Babhir y Mohammed Al Fatil, ambos en la primera parte, y Salem Al Dawsari y Fahad Mosaed Al Muwallad Al Harbi, en la segunda, marcaron para un equipo que firmó una posesión de casi el 74 por ciento a lo largo de los 90 minutos. Después, Pizzi se mostró muy satisfecho.
"El resultado es muy bueno. Es muy meritorio firmar este inicio por todo lo que viene. Con este resultado pudimos concretar el pequeño favoritismo que teníamos en la antesala del partido, algo que es muy difícil como ya vimos en otras experiencias previas, como le sucedió a Australia, vigente campeón que perdió en su debut", dijo Pizzi en declaraciones recogidas por su equipo de prensa.
En el otro partido de la jornada, el que cerraba el grupo D, Irak empató a puntos con Irán tras derrotar a Vietnam. El equipo del esloveno Srecko Katanec tuvo que esperar hasta el minuto 90 para certificar la victoria. Un tanto de Ali Adnan deshizo el empate y dio los primeros tres puntos al conjunto iraquí.