Ducati cuenta con ocho motos en el mundial de MotoGP. La marca italiana, la cual se ha llevado los dos últimos campeonatos con su máquina oficial pilotada por 'Pecco' Bagnaia, provee a cuatro equipos que compiten contra las demás y, por supuesto, entre sí. Y por si había dudas, en 2023 fueron dos motos de la disciplina no oficial, la Pramac de Jorge Martín y la conducida por Marco Bezzecchi las que más incordiaron al turinés a la hora de repetir título. ¿Va a cambiar eso con la llegada de Marc Márquez? Parece que no.
El jefe del equipo oficial, Davide Tarozzi, ha hablado claro sobre la pelea española que se prevé entre Jorge Martín, subcampeón del mundo, y Marc Márquez, quien justo llega ahora a la estructura transalpina. Lejos de querer frenar tal lucha, el ejecutivo explica que en Ducati justo fomentan esa competitividad entre sus pilotos, ya que entienden que a la larga es positiva.
"No tenemos miedo de nuestros pilotos y de la competencia dentro de los equipos de Ducati, de lo contrario no estaríamos suministrando motos de fábrica a Pramac y motos ganadoras a los otros equipos satélite. Compartimos datos y no lo haríamos si tuviéramos miedo. Damos todas las actualizaciones a los pilotos que se las merecen. Si tuviéramos miedo, no lo haríamos, tendríamos un enfoque diferente", comenta en una entrevista concedida a Motorsport.com.
Para Tarozzi se trata de fomentar una política de trabajo y exigencia que de otro modo no se conseguiría. Es obvio que sobre la pista pueden saltar chispas en algún momento, pero a la hora de evolucionar la moto, cree que se dan muchos pasos al frente con cuatro equipos tratando de batirse entre ellos en el garaje y sobre el asfalto.
"La competición entre los equipos Ducati ha elevado el nivel dentro de la fábrica, así que estamos contentos de tener esta competición interna que nos ha hecho crecer en términos de datos. Nuestros ingenieros están contentos de tener ocho oportunidades para ver qué pasa con la moto. Está muy claro. Tenemos ocho Ducati y las tratamos con honestidad. Lo que se merecen está escrito en el contrato que tienen. Y pueden ver todos los datos de los otros pilotos", reitera.
Aunque Tarozzi insiste en la igualdad de oportunidades, es obvio que existen dos grupos bien diferenciados en la marca, ya que el equipo oficial y el Pramac tienen la última Desmosedici, mientras que el Team VR46 y Gresini Racing se tienen que conformar con motos del año anterior. Pese a ello, el jefe de la fábrica recalca que no existen las órdenes de 'equipo'.
"Nunca frenaremos a ninguno de los otros equipos cuando se trate del equipo oficial. Tienen derecho a hacerlo lo mejor posible, a disponer de toda la información necesaria para vencernos. Depende de ellos tener los mejores pilotos y las mejores prestaciones. Gigi Dall'Igna es de Ducati y tiene ocho posibilidades de ganar. Yo soy del Ducati Lenovo (equipo oficial) y tengo dos. Así que depende de estos equipos vencer a los demás. Esa es la mentalidad de Gigi y de Ducati".