Fernando Alonso encara muy posiblemente a partir del mes de enero sus dos últimas temporadas como piloto de Fórmula 1. Y todo apunta a que será con Aston Martin y, a ser posible, intentando colocarle el mejor broche posible a su carrera.
Para ello, la escudería británica le ha fichado al mejor ingeniero del mercado, Adrian Newey. Tras anunciar que dejaba Red Bull, Lawrence Stroll no dudó en contactar con él y dar un golpe encima de la mesa en el mercado. Con él, que hasta marzo no podrá ponerse manos a la obra por normativa, las alas verdes creen que podrán aspirar a todo. Sobre todo, en 2026, cuando se produzca el cambio de reglamento.
Sin embargo, hay una decisión o más bien un problema colocado en la mesa de Aston Martin en estos momentos. Y obviamente afecta al piloto español.
En una época donde los rumores sobre los fichajes para la próxima temporada ya se están acabando, más allá de lo que pueda pasar en Red Bull con Checo Pérez y si Franco Colapinto finalmente consigue un asiento oficial o no, ahora en Silverstone planea un debate sobre si Lance Stroll debe ser el compañero oficial de Fernando o deben buscar otra alternativa para poder luchar por el Mundial de constructores también.
Y es que la diferencia entre ambos pilotos es palpable en cada Gran Premio donde, con el mismo monoplaza, uno siempre lucha por los puntos y el otro cada vez está más lejos de ellos. Y si a ello se le suma el último desastre vivido en Interlagos, donde se estrelló en una simple vuelta de formación, las expectativas con el hijo del director son cada vez menores en el equipo inglés.
Con la fuerte inversión tecnológica que van a hacer con el túnel de viento interno más sofisticado del mercado, entre otras herramientas, muchos piensan que podría malgastarse si no se utiliza de manera adecuada en el momento idóneo, que es en la competición.
Por el momento, Stroll ha disputado 163 carreras en ocho temporadas y ocupa el puesto 13º en el campeonato de pilotos, con los mismos 24 puntos que llevaba en el GP de Hungría en julio, cuando era 10º. Su compañero de equipo, Fernando Alonso, lleva 62 puntos.
Y aunque las comparaciones son odiosas y la experiencia del asturiano es inalcanzable para casi todos, el bicampeón del mundo de F1 ha superado al canadiense en 35 carreras, mientras que Stroll sólo ha terminado por delante suya en diez ocasiones.
Sin duda, no será un decisión fácil si se decide prescindir o colocar como reserva a Lance Stroll por el conflicto familiar que provocaría, pero también permitiría fichar al único piloto que queda libre ahora en el mercado y que está despertando cada día más ilusión en la parrilla: Franco Colapinto.
Además, apostar por él podría suponer un nuevo golpe a Red Bull, quien también está estudiando la posibilidad de ficharle para relevar a Checo Pérez. En favor de Aston Martin, el joven piloto argentino tiene a Fernando Alonso como su referente, ya que fue gran descubridor como ha reconocido en varias entrevistas. El ovetense, por su parte, también le ha hecho algún que otro guiño ante los micrófonos en el paddock, por lo que la sintonía entre ambos podría ser la fórmula perfecta para soñar con todo.