Que una carrera del Mundial de Fórmula 1 acabe sin polémica es prácticamente imposible, pero ya no es tan normal que desde un equipo se acuse al piloto de otro cuanto esta acaba. Eso es justo lo que ha pasado entre Frédéric Vasseur, jefe de Ferrari, y Fernando Alonso, quien durante el último Gran Premio de Qatar –ganado por Max Verstappen–tuvo sus más y sus menos con Charles Leclerc.
La acción que ha llevado a las polémicas declaraciones del ejecutivo de la escudería Ferrari tuvo lugar en la vuelta 33 de la carrera. En la misma, el piloto asturiano cometió un error que le provocó un trompo para que su coche se marchase a la grava momentáneamente. Rápidamente reaccionó y pudo recuperar el sentido para reincorporarse a la carrera. ¿Cuál es el problema entonces? Que su regreso al asfalto estuvo cerca de provocar un accidente con el piloto monegasco. Juzguen ustedes.
Visto el momento de la polémica, el jefe de Ferrari no dudó en señalar a Alonso y mostrarse muy crítico con él; tanto como para asegurar que si se hubiese dado al contrario, el asturiano hubiese puesto el grito en el cielo. "Si hubiera sido al revés, creo que Fernando habría gritado por radio que su vida corría peligro", señala en declaraciones a Sky F1.
Más allá de tal afirmación, el ejecutivo de Ferrari tiene claro que la acción no le gustó, pero que de igual modo son otros los que deben tomar medidas. "Creo que ese movimiento tan brusco, que cortó la pista en 90 grados, fue demasiado, pero yo no tomo las decisiones", añade tras la decisión tomada por los comisarios de no sancionar al piloto español de Aston Martin; eso sí, recibió una reprimenda una vez concluido el Gran Premio de Qatar y tras la revisión de lo sucedido por parte de la FIA.
Nada más acabar la carrera, Fernando fue cuestionado por esa misma acción y si cree que no fue del todo limpia. Al contrario de lo opinado por el jefe de Ferrari, el de Oviedo no cree que sea para tanto. "Simplemente cometí un error en la curva 2 y me fui a la grava, perdí una posición con George y otra con Charles", expresa.
Lo cierto es que ese fallo tuvo consecuencias, ya que el de la escudería británica perdió la posición con George Russell y Charle Leclerc para acabar la carrera en la sexta plaza, justo por detrás del piloto de Ferrari.