Sandra Romero4 min lecturaTras el final del descuento de los 20 céntimos por litro en los combustibles para vehículos y la tendencia alcista de precios que le siguió, llega otra mala noticia que pone aún más cuesta arriba el comienzo del año. El 5 de febrero se establecerá una nueva normativa que generará un aumento en el precio de los combustibles. Según Repsol y Cepsa, la ley comunitaria que aumenta las sanciones a Rusia será la causante de esta subida, en un momento en el cual ya se venía observando un alza en los precios.
A pesar de que en diciembre los precios estaban bajando, en Enero se presentó un cambio en la tendencia y los precios comenzaron a subir. Ahora, se espera que esta tendencia continúe y aumente aún más, a partir del 5 de febrero. Y es que en lo que llevamos de año hasta la publicación de este artículo, el precio del diésel ha subido un 15% y el de la gasolina un 17%.
A comienzos de Febrero entrará en vigor una normativa de la Unión Europea que prohibirá la compra de productos petrolíferos rusos fruto como medida de presión del conflicto internacional. Se estima que, a finales del año pasado, el 44% de las importaciones europeas de gasóleo provenían de Rusia. Si este porcentaje ahora está penalizado, ello implica un aumento de la escasez que tiene como resultado una subida en su cotización que finalmente pagan los consumidores. Es el mercado amigos.
Según los presidentes de Repsol y Cepsa, esto generará un aumento repentino en los precios. A pesar de ello, no se espera que haya escasez de suministro, ya que han tenido tiempo para abastecerse. La dependencia de importaciones de combustibles es un problema en Europa, ya que se requieren 1,3 millones de barriles de gasóleo diariamente para satisfacer la demanda.
La estrategia energética de la Unión Europea de desvincularse de los combustibles fósiles ha llevado a una disminución de las inversiones y al cierre de 26 refinerías en los últimos 12 años, lo que ha disminuido la capacidad de refino en un 18% y ha aumentado la dependencia de otros países. Hay una agenda de electrificación que cumplir y hay que llegar a su objetivo cueste lo que cueste. Como ocurre más veces de las que debería, en estos planes se olvida la situación real de los ciudadanos de a pie, que tienen que lidiar con la subida del nivel de vida, la subida del Euribor, combustibles y precios de los vehículos.
Hasta la fecha Europa también se ha apoyado en comprar grandes cantidades de combustible en Arabia Saudí, India o Emiratos Árabes. Tendrán que aumentar esos contratos o llegar a un nuevo acuerdo con Turquía que permita estabilizar los precios europeos y amortiguar la subida prevista. Por tanto y dependiendo de estos factores, todavía está por ver de cuánto será la subida real a los que los consumidores tendremos que hacer frente, pero que no nos quepa duda de que tendremos que rascarnos el bolsillo un poco más. Os mantendremos informados.