Los problemas crecen en el Valencia. Con una plantilla excesivamente corta, fruto de la mala planificación y la casi nula inversión realizada por Meriton, las lesiones están condicionando de manera importante a Rubén Baraja, que ahora ha visto caer a Diakhaby, el gran pilar de su defensa. Las alarmas se han encendido con el franco-guineano y jugadores como Gabriel Paulista están llamados a dar un paso al frente.
Durante el verano, se barajó la posibilidad de que el brasileño abandonase el equipo junto a otros veteranos como Cavani o Samu Castillejo. Pero ante la falta de ofertas que le igualasen sus condiciones en el club che, el ex del Villarreal apostó por quedarse. Además, a Baraja, muy crítico con las excusas de la derrota ante el Betis, ni mucho menos le sobraba. Y con la cesión de Comërt al Nantes, se le abrió una puerta que ahora podría quedar de par en par tras la lesión de Diakhaby.
Después de perderse tres partidos por unas molestias, Paulista regresó en el choque ante la Real Sociedad y disputó el partido completo frente al Betis. De este modo, ya participado en cinco encuentros de los ocho que ha disputado el Valencia, por lo que ha conseguido una cuarta parte de su renovación.
Según ha informado Radio Valencia Cadena SER, el central tiene una cláusula en su contrato por la cual renovará automáticamente por un año más su contrato, que acaba el 30 de junio de 2024, si juega al menos 20 partidos durante la presente temporada. Una cifra que, dada la falta de efectivos y la confianza que ha depositado en él el técnico che, está sin duda al alcance de su mano.
Paulista aterrizó en Mestalla en 2017 procedente del Arsenal a cambio de 12 millones de euros. Pero fue en 2021, cuando firmó su última renovación con Anil Murthy como presidente, cuando se incluyó está condición, que podría hacer que el brasileño vea ampliada su vinculación hasta 2025 en los próximos meses.
A sus 32 años, eso sí, cabe recordar que Paulista ha sido un futbolista propenso a las lesiones en los últimos años, por lo que todo dependerá de su estado físico para poder ganarse la ampliación de contrato. En este sentido, en la pasada campaña 22/23 sólo pudo llegar a los 23 partidos, mientras que un curso antes, en la 21/22, se quedó en 21. Unas cifras que le permitirían llegar muy justo a la barrera acordada. Su espejo, por tanto, está en la 20/21, cuando sí gozó de la continuidad deseada para alcanzar un total de 32 encuentros oficiales.