La Unión Deportiva Almería consiguió tres puntos bastante valiosos para romper con una mala racha de cuatro partidos sin ganar y sin marcar. Esta vez, al final de la primera parte, el equipo de Rubi ya iba ganando por tres goles de diferencia. El ambiente en el Power Horse Stadium era una auténtica locura, a pesar de acoger el peor registro de entrada desde su regreso a Primera división.
Según mostraron los compañeros de La Voz de Almería, un total de 10.783 personas estuvieron presentes en el estadio almeriense para apoyar al equipo. Se trata de la peor entrada de público en Almería. Sí que es cierto que cuando más espectadores obtuvo el Power Horse Stadium fue en la primera jornada ante el Real Madrid. A partir de ahí fue en detrimento en los siguientes partidos ante Sevilla, Osasuna y este último partido ante el Rayo Vallecano.
Aun así, el público que estuvo se hizo notar no solo en la grada, sino que también lo hizo en el césped. Rubi y toda la plantilla sabe lo importante que es la afición, sobre todo en momentos difíciles como el que estaba viviendo el equipo. La parroquia rojiblanca no falló y estuvo con sus jugadores animándolos.
Quizás la ovación de la noche se la llevó Leo Baptistao, quien al ser sustituido la gente se puso en pie para agradecerle el partido que había realizado el brasileño. Fue el más enérgico del partido, tan solo le faltó marcar gol, pero lo cierto es que esa electricidad se la transmitió a todo el equipo. Estuvo acertado en defensa, ayudando a Mendes en todo momento y en ataque tan solo le faltó saborear ciertas ocasiones que tuvo.
Gonzalo Melero, titular ante el Rayo y por primera vez con la camiseta de la UD Almería, mandaba un mensaje a la afición en rueda de prensa esta semana, como significante de la importancia que tienen dentro del club: “La afición está volcada tras el ascenso y los primeros partidos. Lo vi por la tele y era increíble cómo alentaba al equipo. Puede ser clave para que consigamos los objetivos. Ojalá puedan ver el sábado un Almería que compite y que se deja el cien por cien”.