Cada carrera que pasa empieza a enturbiarse más el futuro de Pedro Acosta en KTM, al punto de que no son pocos lo que empiezan a pensar en que un cambio es necesario para salvar la carrera del murciano, que no deja de tener apenas 20 años y no ser más que una promesa. Pero las altísimas expectativas con las que subió a MotoGP, sumadas a que entró en sus primeras citas como un elefante en una cacharrería, subiendo al podio y peleando por victorias, hicieron más dura su caída. Ya terminó el curso de forma irregular, pero este 2025 tanto él como su moto parecen de una división inferior.
Con la mejora de las marcas japonesas y la superioridad de Ducati, la lucha por ser la segunda marca empieza a ser una guerra, la que ahora mismo KTM está perdiendo. Aprilia está por encima, Honda ha mejorado y Yamaha está en proceso, mientras los austriacos siguen anclados e incluso en un notable retroceso. Desde entonces los rumores sobre la ruptura del contrato del murciano para tratar de subirse a una moto mejor son abundantes, y se ha generado un debate entre los que piensan que debería quedarse y los que se buscarían la vida en otro lado.
Uno de los que se ha atrevido a aconsejar al 'Tiburón' es su ídolo, Kevin Schwantz, quien no esconde que hay veces en las que es mejor apostar por uno mismo y buscar el cambio que revitalice su carrera. "Creo que Pedro tiene una gran carrera por delante. Que se tome su tiempo y aprenda todo lo que pueda con la KTM. Pero si se presenta la oportunidad de subirse a una de las motos que están delante, creo que, a su edad, debería aprovecharla”. Falta por ver lo que sucede, porque si las cosas no cambian, es imposible pasar por alto que podemos estar cerca de un terremoto en forma de fichaje estelar.
Otro de los problemas de Acosta está siendo la gestión de los domingos. Mientras los sábados en las carreras al sprint las cosas más o menos funcionan y suele acabar arriba, cuando llega el domingo todo se tuerce. El motivo es la bajada de rendimiento de la KTM con el paso de las vueltas. Según empieza la carrera va bien, pero cae a un ritmo vertiginoso. Los neumáticos se degradan muy rápida y se convierte en una moto muy complicada de conducir, que le ha generado muchos problemas a Acosta, ya sean caídas o muy malos puestos. Una clara referencia es que si solo se tomaran los puntos de los sábados sería 6º en la general, pero con los domingos caería al 15º puesto.
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